Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com Inaugurada la extensión de la Línea Amarilla del Metro de Oporto

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Su construcción ha corrido a cargo de Ferrovial, y los sistemas de señalización han sido suministrados por Alstom

Con viajes gratuitos entre Santo Ovídio y Vila d’Este, el 28 de junio se inauguró la nueva extensión de la Línea Amarilla del Metro de Oporto. La nueva extensión, con un coste de 208 millones de euros, consiste en un tramo con doble vía de 3,15 kilómetros que prolonga la Línea Amarilla desde la Estación de Santo Ovidio hacia el sur de la ciudad.


Inaugurada la extensión de la Línea Amarilla del Metro de Oporto
 
 
 

(03/07/2024)  

El nuevo tramo da servicio a los barrios de Vila Nova de Gaia Mafamude y Vilar do Paraiso, Oliveira do Duero y Vilar do Andorinho. Asimismo, se ha llevado a cabo la construcción de un viaducto, un túnel de 770 metros y la ejecución de tres nuevas estaciones (Manuel Leão, Hospital Santos Silva y Vila d’Este). Se calcula que alrededor de 20 millones de pasajeros utilizarán esta ampliación durante el primer año.

Partiendo de Santo Ovídio, la línea desciende por la Avenida da República en dirección sur, cruzando un viaducto de 420 metros que evita la nueva rotonda norte. Después del viaducto, la línea prosigue  hasta la estación de metro Manuel Leão; desde allí, se proyecta un túnel de 634 metros hasta la estación Hospital Santos Silva, situada en superficie y que facilita el acceso al hospital a pacientes y profesionales sanitarios. La línea continúa hasta la última estación en Vila d’Este.

El viaducto, una obra singular

La ampliación incluye la creación de un nuevo Parque de Materiales y Talleres en Vilar de Andorinho, de casi doscientos metros de longitud y capaz de mantener hasta 32 vehículos, complementando las instalaciones de Guifões.

Una de las partes más singulares y complejas de esta obra ha sido la construcción del viaducto que conecta las estaciones de Santo Ovídio y Manuel Leão. La estructura, construida con celosía metálica sobre pilares de hasta veintidós metros de altura, traza una gran curva de 420 metros de longitud. Debido a la dificultad de su montaje con grúas desde tierra, se recurrió a empujar la estructura de 2.746 toneladas, deslizándola por su base de un extremo a otro. Para su montaje se requirieron 143 jornadas de veinticuatro horas, en las que participaron 77 personas en diferentes turnos.

La construcción de la extensión de la Línea Amarilla ha corrido a cargo de Ferrovial, en consorcio con la constructora portuguesa Alberto Couto Alves, mientras que  Alstom ha desarrollado y equipado la extensión de la nueva línea con el mismo sistema de señalización que ya está en servicio en la red, incluyendo un enclavamiento de última generación que permite el control de los vehículos en tiempo real. El desarrollo de ingeniería, así como la instalación y puesta en servicio del sistema, se gestionan desde las instalaciones de Alstom en Maia, Oporto.