En 2011, los Ferrocarriles Portugueses, CP, redujeron sus pérdidas a 43 millones de euros frente a los 74 de 2010, y en este ejercicio de 2012 esperan, por primera vez, obtener beneficios operacionales, estimados en 48 millones de euros.
(30/01/2012) Este cambio de tendencia, resultado de recortes en los servicios, subidas de tarifas y ahorros de costes en la operación, no permite todavía compensar los costes financieros que supone el pago de la deuda de la compañía, que en 2011 ascendieron a 167 millones de euros, también inferiores a los 195 millones de 2010, según informa el diario O Publico de Lisboa.
La deuda acumulada por CP que se situaba en los 3.500 millones de euros e diciembre de 2011 y crecerá hasta los 3.700 a finales de 2012, según las previsiones de la empresa., y ello en una situación muy complicada para la financiación que no tendrá solución a corto plazo, por el desplome del rating de la República Portuguesa, que es el avalista de la deuda de CP.
Más recortes
Así, con el pasivo de la empresa condenado en la actual coyuntura a seguir creciendo, sin que ni ella ni el estado portugués tengan recursos para solucionar la situación, CP se propone seguir reduciendo sus costes, lo que implicará reducir el número de trabajadores de sus servicios centrales, si bien no se prevén esa reducción en los operacionales. Para ello, la consultora Deloitte trabaja ya en la identificación de puestos redundantes en varios departamentos.