Los trenes recalan acualmente en el Muelle del Ramal, el cual abandonarán tras la construcción de la nueva línea

(13/10/2011) El puerto pontevedrés de Villagarcía de Arosa mantiene una veteranísima relación con el ferrocarril. Fue el primer puerto gallego en contar con vías, al hilo de la construcción de la línea Santiago-Carril, y desde entonces, con las variaciones que han tenido ferrocarriles y muelles, han sostenido esta ligazón hasta nuestros días. El último episodio está siendo la construcción de un nuevo ramal que acerque las vías desde su actual término, en el Muelle del Ramal, a la zona donde se está concentrado la actividad de carga del puerto.

Las obras licitadas ahora tienen un presupuesto de 6,7 millones de euros y, un plazo de ejecución de doce meses, estando prevista su finalización en ejercicio 2013. Esta obra cuenta con el apoyo económico de la Unión Europea que financiará, con cargo a los Fondos de Cohesión, aproximadamente el 80 por ciento de la inversión.

Los objetivos fundamentales de este proyecto son, en primer lugar, trasladar la conexión ferroviaria actual del Muelle del Ramal a los Muelles Comercial y Comboa en esta primera fase, para posteriormente ampliarlo hasta el Muelle de Ferrazo, completando así, un trazado ferroviario moderno y acorde con las demandas y necesidades de los clientes del puerto.

Maqueta donde se dibuja el futuro entorno urbano del nuevo ramal ferroviario

En segundo lugar, el nuevo ramal ferroviario permitirá la liberación del Muelle del Ramal (situado entre las playas de Compostela y A Concha, el Puerto Deportivo y la zona de paseos marítimos del Puerto de Villagarcía) de los usos estrictamente portuarios. De esta forma el Muelle del Ramal, se incorporará a las zonas de usos ciudadanos que conforman el frente portuario, integrado con el centro de Villagarcía de Arosa.

Integración urbana

La obra supondrá una sensible renovación de la fachada urbana de Vilagarcía, ganando espacios actualmente portuarios para la ciudad, con nuevos equipamientos urbanos como aceras, carril bici, dobles carriles de circulación rodada y paseo.  

Todo el nuevo trazado ferroviario discurrirá por viales portuarios, de forma respetuosa desde el punto de vista medioambiental y social, sin que su ejecución suponga ninguna expropiación ni merma alguna de las condiciones de acceso de los equipamientos, locales o empresas existentes a lo largo del trazado. Las vías estarán embebidas en los propios pavimentos.

En definitiva, la solución adoptada por la Autoridad Portuaria supone, además de la resolución de la conexión ferroviaria con los nuevos muelles, los que poseen las mejores condiciones de líneas de atraque y calados, una sustancial ampliación de las condiciones de permeabilidad de los espacios del frente marítimo de la ciudad con su parte central, uniendo el centro uerbano con el mar, los parques, paseos marítimos, carriles bici y las zonas de ocio, además de una importante mejora de la capacidad de entrada y salida de vehículos de la ciudad y un importante incremento de los aparcamientos.

Plano del puerto de Villagarcía donde aparece dibujado el nuevo ramal y las derivaciones previstas  a los muelles comerciales de Ferrazo, en el extremo izquierdo del mapa, Camboa y Comercial, con la liberación del Muelle del Ramal, localizado en el extremo superior derecho del mapa