Un estudio publicado por la Comisión Europea destaca los beneficios para los usuarios de la competencia tanto en los servicios ferroviarios de pasajeros como en los de mercancías. Revela que el aumento de la competencia en el mercado ferroviario de la Unión Europea ha dado lugar a reducciones significativas en los precios de los billetes para los pasajeros de ferrocarril y en los costes del transporte de mercancías.
(25/09/2024)
Las ganancias en eficiencia son evidentes en todos los segmentos: acceso abierto para pasajeros, obligaciones de servicio público y transporte de mercancías. Por ejemplo, en el mercado de acceso abierto, Italia experimentó una reducción del 31 por ciento en los precios, mientras que Austria registró un aumento del 41 por ciento en la frecuencia del servicio, lo que ilustra cómo la competencia mejora tanto la asequibilidad como la calidad del servicio.
Estas mejoras de eficiencia brindan beneficios como tarifas más bajas, mayor frecuencia, más comodidad y ahorro de costos públicos. En el mercado de las obligaciones de servicio público, en las que los Estados miembro compensan a las empresas ferroviarias por prestar servicios esenciales, pero comercialmente inviables, la licitación competitiva en Francia dio lugar a un aumento de frecuencia de hasta el 110 por ciento en determinadas líneas, junto con la introducción de nuevo material rodante.
En el mercado ferroviario de mercancías, la competencia ha provocado una disminución de los precios y de los costes operativos, con un ligero aumento de la demanda, especialmente en el transporte intermodal de mercancías, como lo demuestra el crecimiento estable y resistente de la participación ferroviaria en Alemania.
Cuarto Paquete Ferroviario
Aunque la apertura del mercado del transporte de pasajeros es relativamente reciente y sus efectos totales aún están pendientes, la ejecución continua del Cuarto Paquete Ferroviario y las medidas asociadas será clave para alcanzar su máximo potencial.
Las áreas clave para mejorar en el mercado de servicios ferroviarios incluyen la infraestructura, la emisión de billetes y la igualdad de acceso. Con respecto a la infraestructura, es esencial mejorar la interoperabilidad, la digitalización y desarrollar horarios flexibles y coordinados, junto con una gestión eficiente del tráfico de red a nivel de la Unión Europea.
En el caso de la emisión de billetes, garantizar un acceso justo a las plataformas de venta de billetes para todos los operadores, así como la disponibilidad de ofertas de billetes para los proveedores de billetes independientes, promovería la transparencia y la competencia. Además, debe garantizarse la igualdad de acceso a la infraestructura, la disponibilidad y financiación del material rodante y las instalaciones de servicio para permitir que todos los operadores compitan en igualdad de condiciones.
Gestión de la capacidad de la infraestructura
Abordar estos desafíos es crucial para desbloquear todo el potencial de la competencia, lo que beneficiará tanto a la industria como a los consumidores. Por ello, la Comisión presentó una propuesta relacionada con la gestión de la capacidad de la infraestructura ferroviaria para mejorar la eficiencia en el uso de la red ferroviaria
Al mismo tiempo, la Unión Europea está invirtiendo significativamente en su infraestructura ferroviaria a través del Mecanismo Conectar Europa.
En el marco de las últimas convocatorias de propuestas de transporte del Mecanismo (2023), en julio de 2024, la Comisión seleccionó 134 proyectos de infraestructuras de transporte para recibir más de 7. 000 millones de euros. El 81 por ciento de esta inversión se dedicó a proyectos ferroviarios (más de 5.700 millones de euros).
Cuando la Red Transeuropea de Transporte esté completa, reducirá significativamente los tiempos de viaje en tren. Por ejemplo, en 2030 los pasajeros podrán viajar entre Copenhague y Hamburgo en 2 horas y 30 minutos en tren, en lugar de las 4h20 que se requieren hoy.
Hay que señalar que la Unión Europea adoptó cuatro paquetes legislativos entre 2001 y 2016, con el objetivo de abrir a la competencia los mercados nacionales y transfronterizos de transporte de mercancías y pasajeros. Este ha sido un paso importante hacia la creación de un espacio ferroviario europeo integrado y un auténtico mercado interior del ferrocarril en la Unión Europea.