(20/09/2024)  

Esta medida se está llevando a cabo en todas las estaciones donde se ha detectado, en una fase de inspección previa, que la diferencia en altura entre entre el andén y el tren dificulta la movilidad de ciertos colectivos. La instalación de estas rampas en los bordes de los andenes se está haciendo en los puntos coincidentes con las puertas orientadas a personas con movilidad reducida. Asimismo, cada rampa se instala de forma independiente, adaptándose a las circunstancias concretas que se requieren en cada punto.

En una fase de intervención posterior se dispondrá de un segundo elemento en los lugares donde también sea necesario. Se trata de un perfil de goma resistente y robusto, también denominado ‘gap filler’, que se instala a lo largo del borde del andén para reducir el espacio entre el mismo y el acceso al tren.

Estas medidas no solo mejoran la accesibilidad, sino que contribuyen a reducir los tiempos de subida y bajada del tren. Se trata, en definitiva, de un paso más en materia de accesibilidad dentro de los que viene desarrollando el metropolitano bilbaíno para mejorar la calidad del servicio que ofrece a los usuarios.

Rampas en veinte estaciones

Una vez concluida la instalación de estas rampas, las estaciones que contarán con este elemento serán las de Lutxana, Astrabudua, Leioa, Lamiako, Gobela, Neguri, Aiboa, Bidezabal, Berango, Sopela, Urduliz y Plentzia, en la Línea 1, y las de Ansio, Barakaldo, Bagatza, Urbinaga, Sestao, Portugalete y Peñota, en la Línea 2.