Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com En servicio la electrificación de la línea de alta velocidad entre Plasencia y Badajoz

Portada:  Noticia de actualidad


Empiezan a circular los primeros trenes Alvia con tracción eléctrica en el tramo Monfragüe-Cáceres-Mérida-Badajoz

El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha puesto en servicio la electrificación de los 195 kilómetros de vías alta velocidad que unen Plasencia, Cáceres, Mérida y Badajoz, lo que permitirá una mayor fiabilidad, reducir algunos minutos el tiempo de viaje y el uso de energía renovable. 


En servicio la electrificación de la línea de alta velocidad entre Plasencia y Badajoz
 
 
 

(15/12/2023)  

Así, han empezado a circular los primeros trenes Alvia con tracción eléctrica en el tramo Monfragüe-Cáceres-Mérida-Badajoz, que transportan más de 90.000 pasajeros al año en los dos sentidos. Recorrer los más de 190 kilómetros que separan Badajoz y Monfragüe con tracción eléctrica generará un ahorro energético anual de 732 toneladas equivalentes de petróleo y evitar la emisión de 2.674 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera. 

La electrificación del tramo Plasencia-Badajoz, con una inversión de 90 millones de euros, se basa en un sistema en corriente alterna de 2x25 kV y 50 hercios de frecuencia. La alimentación de energía eléctrica a la línea se realiza mediante subestaciones de tracción que transforman la tensión de 400 kV a 2x25 kV, que es la que requiere la catenaria. 

Con este sistema, además, se amplía la distancia entre subestaciones de tracción, unos sesenta o 65 kilómetros, lo que mejora el despliegue de estas instalaciones y reduce el impacto en el entorno y el medio ambiente. En paralelo, Adif AV avanza en la puesta en marcha del sistema de control y mando de trenes ERTMS nivel 2 y el montaje de vía y la electrificación del baipás de Mérida. 

 

Instalaciones punteras y más fiabilidad

El tendido de la catenaria se inició en primer lugar en 125 kilómetros entre Plasencia y la Bifurcación de Peñas Blancas, a unos dieciocho kilómetros al norte de Mérida, tramo que incluye las estaciones de estaciones de Plasencia y Cáceres. Posteriormente, se desplegó entre la Bifurcación de Peñas Blancas y la frontera portuguesa y desde Aljucén a Mérida, en 103 kilómetros, donde se ubican las estaciones de Mérida, Aljucén, Montijo y Badajoz. La catenaria instalada es interoperable, de tipo C-350, utilizada para las nuevas líneas de alta velocidad en España. Para su instalación se izaron más de 5.000 postes a lo largo del trazado. 

Además, se han electrificado algunos tramos de la red convencional conectados al corredor, necesarios para conseguir una funcionalidad integral. El tramo Plasencia-Badajoz cuenta con tres subestaciones de tracción, ubicadas en Cañaveral (Cáceres), Carmonita y Sagrajas (Badajoz). Además de transformar la tensión, su misión consiste en alimentar otros sistemas, como la iluminación de túneles, la calefacción de agujas, las telecomunicaciones móviles o los edificios técnicos. 

Asimismo, dispone de doce centros de autotransformación, encargados de distribuir la energía a lo largo de la catenaria. Estos centros están ubicados entre las subestaciones de tracción, a una distancia de unos diez kilómetros aproximadamente. 

Ancho estándar y tráfico mixto

El tramo cuenta también con telemando de energía, que realiza el telecontrol y la supervisión desde el Centro de Regulación y Circulación de las subestaciones eléctricas de tracción y la catenaria. 

El primer tramo del corredor de alta velocidad La conexión Plasencia-Cáceres-Mérida-Badajoz, en servicio desde 2022, cuenta con 195 kilómetros de vías electrificadas, que incluyen 150 kilómetros de vía de nueva construcción y los tramos de red convencional conectados a corredor que le dan una funcionalidad integral. 
Diseñada en ancho estándar y para tráfico mixto, cuenta con doble vía en la mayor parte de su recorrido. 

El tramo entre Plasencia y Badajoz es el primer tramo en servicio de los tres que configuran el corredor de alta velocidad a Extremadura. Mientras, se trabaja en completar el corredor, esta línea une la región con el centro del país, conectando desde Monfragüe con la línea ferroviaria convencional, que fue modernizada con una inversión de 55 millones de euros.

En concreto, se renovaron las instalaciones de señalización y telecomunicaciones de los 230 kilómetros del trazado de ferrocarril convencional entre Monfragüe y Humanes (Madrid), con el fin de que los trenes circulen con los mismos sistemas señalización y seguridad en todo el recorrido hasta Madrid, reforzando así la fiabilidad y capacidad de circulación de la línea de ancho convencional Madrid-Valencia de Alcántara.