(03/02/2023)  

Con la apertura de una sucursal con en Francia, Renfe seguirá con la expansión de la  actividad de Alta Velocidad en los corredores de mayor densidad e interés económico. Además, le servirá para , optar también a la prestación de servicios públicos. La constitución de esta sucursal servirá para la firma de contratos, emisión de facturas, contratación de personal, gestión de importación o comercialización de actividades como la venta de billetes, entre otros aspectos.

Renfe tiene como objetivo abrirse camino en el mercado francés, donde su objetivo  permanecer a largo plazo, dentro de su estrategia de internacionalización. La operadora quiere convertirse en un operador de referencia en el país vecino.

Junto con los planes de la nueva sucursal, siguen en marcha las gestiones para conseguir el Certificado de Seguridad para operar en toda Francia, como el que tiene SNCF-Ouigo, en España) y aprovechar la incipiente liberalización que el Estado francés y SNCF han anunciado.  En la actualidad  ya lo ha obtenido para prestar servicio en las líneas Barcelona-Lyon y Madrid-Barcelona-Marsella.

Planes

De forma paralela a estas gestiones, la operadora continúa con la formación de los maquinistas que destinará a estas líneas. Cuando finalice este fase y se consigan todas las habilitaciones necesarias para operar, se definirá el plan de transporte para estas nuevas conexiones internacionales; un programa que será progresivo hasta alcanzar las 28 circulaciones semanales.

Por otra parte, el 16 de enero empezaron las pruebas en blanco de los trenes de alta velocidad que circularán entre España y Francia, con las que se reproducen las características del servicio comercial que se va a prestar y  demostrar la solvencia operacional.

Más información sobre la presencia internacional de Renfe en el número 681 de la versión impresa de Vía Libre, de febrero de 2022