(19/01/2022)  

El contrato, que ha sido adjudicado por un importe de 1.782.769 euros y cuenta con un plazo de ejecución de doce meses, abarca la renovación de uno de los distintos tipos de detectores instalados en las vías de la red, los denominados detectores de cajas calientes (DCC) que vigilan la temperatura de la rodadura (cojinetes y frenos) de los trenes, para poder reaccionar a tiempo y evitar eventuales incidencias.

La línea de alta velocidad Córdoba-Málaga tiene instalados siete DCC dobles en distintos puntos de la línea, que se renovarán gracias a este contrato y permitirán optimizar este equipamiento y aumentar su fiabilidad.

Sistema de detectores de cajas calientes

Este sistema de DCC es capaz de comprobar la temperatura producida por el calentamiento de las cajas de grasa, las ruedas y los discos de freno del material rodante que circule por el trayecto en el que está instalado, en cada uno de los carriles, en los dos sentidos de la circulación.

En caso de que dicha temperatura sobrepase un determinado umbral, el sistema envía una señal que ordena la reducción de la velocidad del tren o incluso su detención inmediata si se registra una temperatura extrema.

Otros tipos de detectores

Además de los comprendidos en este contrato, existen otros tipos de detectores instalados en las vías de la red ferroviaria, como los que vigilan la eventual caída de objetos en la vía, los que detectan la nieve o los que advierten de viento lateral, entre otros.

Todos estos equipos envían la información que recogen en las vías y son gestionados por los Centros de Regulación de la Circulación (CRC). En el caso de los detectores de la línea de alta velocidad Córdoba-Málaga, mandan sus señales al CRC de Antequera y al Puesto Regional de Operación (PRO) de Puente Genil.