Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com Endurecimiento de aparatos de vía mediante uso de explosivos

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Proceso de Riometal de Maxam

Una de las piezas críticas de desgaste de la red ferroviaria es el corazón de los cruzamientos, un elemento sometido a mayores esfuerzos que las vías. Para su construcción suele emplearse acero Hadfield, con una dureza “de fábrica” en torno a 200-220 HBW.


Endurecimiento de aparatos de vía mediante uso de explosivos
 
 
 

(09/09/2020)  

Maxam, empresa española dedicada a la fabricación y aplicación de explosivos y con cerca de 150 años de historia, ha desarrollado un proceso de endurecimiento de aparatos de vía que permite aumentar la dureza por encima de 350-400 HBW, mediante el disparo de una o más cargas explosivas especialmente diseñadas para ello. Este proceso, denominado Riometal, se realiza en las instalaciones de la empresa en Burgos, antes del suministro e instalación de los equipos en las redes ferroviarias o de metro.

Técnica

El endurecimiento con explosivo de los corazones de los cruzamientos ferroviarios, de acero Hadfield, es una técnica ampliamente extendida para aumentar su resistencia al desgaste, especialmente en los primeros ciclos de uso, cuando aún no ha alcanzado su dureza definitiva y es más susceptible a la abrasión y el desgaste.

El endurecimiento reduce de su mantenimiento y amplía su vida útil, con lo que se consigue una reducción de su coste del ciclo de vida y de los tiempos y números de paradas para reparaciones, recargas de material o sustituciones. Todos ellos, aspectos fundamentales para los gestores de redes ferroviarias, que pueden conseguir alargar la vida útil de estos aparatos en un 35 por ciento.

MAXAM que lleva aplicando este proceso desde hace cerca de veinte años, ha tratado más de 3.000 cruzamientos de fabricantes europeos como Amurrio Ferrocarril y Equipos, JEZ, DF Rail, Vossloh Cogifer, Outreau Technologies, etcétera que han sido instalados en Europa, África y América.

Resultados

En 2019, Maxam realizó un estudio de los resultados obtenidos en las 1.398 piezas que endureció con el proceso Riometal para uno de sus clientes internacionales, entre junio de 2015 y agosto de 2019.

Para ello, recopiló las durezas medidas y registradas en los informes de calidad en tres puntos de cada pieza: corazón, pata 1 y pata 2. La conclusión fue que, en las 1.398 piezas analizadas, se alcanzó un valor promedio de dureza de 364 HBW, con un 10 por ciento de las medidas superando, incluso los 394 HBW y el 99,5 por ciento los 324 HBW. En todos los casos se superaron los requisitos establecidos en la norma UNE-EN-15.689. Los resultados obtenidos se pueden ver resumidos en la tabla.

Para garantizar los requisitos de dureza superiores a 350 HBW exigidos por algunas normativas internacionales, como las de Estados Unidos o Australia, más altos que los de la normativa europea EN-15.689, Maxam desarrolló el proceso Riometal con dos detonaciones.

En una pieza de diseño como el de la figura se realizó un estudio de los resultados que se obtenían aplicando este proceso. En la pieza se establecieron once puntos de control de dureza Brinell, que se midieron antes y después de cada detonación.

Se observó, en primer lugar, una alta dispersión de la dureza inicial de las piezas en los distintos puntos de control, que variaba entre 175 y 244 HBW, con media de 202 HBW, lo que podría producir desgastes diferenciales muy significativos dentro de la misma pieza.

Tras la primera detonación, se produjo un incremento de la dureza media del 64,7 por ciento, concretamente de 202 a 333 HBW), y se homogeneizó la dureza entre los distintos puntos, con un mínimo de 317 HBW y un máximo de 345 HBW.

Tras la segunda detonación, se alcanzó un incremento de dureza del 7,9 por ciento, de 333 a 360 HBW, pero, sobre todo, se consiguió que el 100 por cien de los valores (33/33) de dureza final estuvieran por encima de los 351 HBW que indican la normativa de la Arema en Norteamérica.

Analizando tanto los datos históricos y los últimos ejemplos analizados, se puede afirmar que con el proceso Riometal, con una o dos detonaciones, se alcanzan y sobrepasan las durezas requeridas tanto por las normas europeas como por las normas norteamericana y australiana, aún más exigentes, para la dureza superficial de los corazones de punta fija de cruzamientos ferroviarios.

Javier Carrillo de Albornoz Portes, director comercial de Maxam España