(19/09/2019)  

El ministro realizó un viaje a bordo de un tren de pruebas de la serie 121 desde la estación de Camp de Tarragona hasta la nueva estación de L’Hospitalet de l’Infant, en la variante Vandellós-Tarragona, cuyas previsiones contemplan la puesta en servicio antes de finalizar el año.

El ministro afirmó que esta infraestructura, junto con la nueva estación de La Sagrera y el nuevo acceso a la terminal T1 del aeropuerto de Barcelona, son clave en el futuro mapa ferroviario catalán y las mayores inversiones en esta materia que el Ministerio de Fomento está acometiendo en Cataluña.

Ábalos declaró que en el último año la licitación de inversión en esta Comunidad Autónoma ha aumentado un 76 por ciento, superando la cifra de los 1.000 millones de euros, de los que casi el 50 por ciento se han destinado al ferrocarril.

Variante Vandellós-Tarragona

Con una inversión cercana a los 700 millones de euros, el nuevo trazado en doble vía, apto para alta velocidad y tráfico mixto, conectará el Corredor Mediterráneo desde Vandellós con la línea de alta velocidad Madrid-Barcelona-frontera francesa y con la línea de ancho convencional Tarragona-Reus.

Inicialmente dispondrá de doble vía en ancho ibérico hasta los cambiadores de ancho de La Boella y, desde allí, en ancho estándar hasta Camp de Tarragona, para posteriormente iniciarse su adaptación al ancho estándar coordinadamente con el resto de tramos.

La variante cuenta con una longitud de 64,1 kilómetros —incluyendo los ramales de conexión—, y sus principales infraestructuras son el túnel de Los Rojales, de 1.910 metros, y diversos viaductos que suman una longitud superior a 9,1 kilómetros, entre los que destacan el de Cambrils, de 746 metros, y el del Francolí, de 3.485 metros. Otras infraestructuras destacadas son las nuevas de estaciones de L’Hospitalet de l’Infant y Cambrils y el cambiador de ancho de La Boella para la conexión en vía doble en ancho estándar con la línea de alta velocidad.

Su entrada en funcionamiento permitirá eliminar el actual trazado en vía única por la zona costera del sur de Tarragona con los consiguientes beneficios de seguridad y permeabilidad del ferrocarril para los municipios y sus ciudadanos.

Una vez puesta en servicio, incrementará significativamente la capacidad y operatividad para todo tipo de tráficos, lo que supondrá, entre otras ventajas, una reducción de unos treinta minutos en el tiempo de viaje por ferrocarril entre Barcelona y Valencia.

La nueva variante generará importantes beneficios para los servicios de viajeros que circulan por el sur de Cataluña y el eje de Levante, y se convertirá en una pieza clave para el desarrollo del Corredor Mediterráneo, un proyecto estratégico por su elevado interés socioeconómico.

Pruebas de fiabilidad, en octubre

Una vez completada la construcción de la infraestructura e instalaciones, hasta la fecha y mediante trenes laboratorio de Adif y material comercial se han completado diferentes pruebas entre los tramos de ancho estándar y convencional, entre las que destacan las auscultaciones de vía y sistemas de electrificación, comprobaciones de las instalaciones de seguridad, comunicaciones y señalización como el sistema ERTMS.

Según la planificación vigente, durante el mes de octubre está previsto que se lleven a cabo las pruebas de fiabilidad, que constituyen la última fase antes del proceso de formación de maquinistas.

Paralelamente, se está avanzando en la tramitación administrativa necesaria para la homologación de la nueva infraestructura y el conjunto de los sistemas y la obtención de las preceptivas autorizaciones por parte de los organismos competentes de forma previa a la puesta en servicio.

Balance de la inversión en el sector ferroviario

Ábalos aprovechó la visita a las obras de la variante para hacer un balance global desde su llegada al Ministerio de Fomento, con más de 9.129 millones de euros de licitación en el sector ferroviario. De este total, 4.794 millones de euros se han destinado a actuaciones de construcción y mejora de las conexiones ferroviarias existentes, de los cuales 1.822 millones de euros se han invertido en el Corredor Mediterráneo.

El responsable del Departamento reconoció los importantes retos que existen en Cataluña en materia de infraestructuras, en concreto en Rodalies, e insistió en la necesidad de abordar las incidencias en el servicio, motivo por el cual Fomento y Generalitat están trabajando en la firma de un protocolo que supondrá una buena respuesta a estas necesidades.

Por último, Ábalos informó de que, ante la necesidad de analizar y estudiar las necesidades de actuaciones en el Camp de Tarragona en el nuevo escenario ferroviario, Fomento ya ha enviado la solicitud de representantes de la Comisión Técnica, cumpliendo el compromiso adquirido con el consejero de Transportes y Sostenibilidad de la Generalitat y los alcaldes de Tarragona, Reus, Vila-seca, Cambrils y Salou.