Ayer jueves, se inauguró la rehabilitación del edificio de la antigua estación de Burgos, antiguo edificio construido en 1902 por la Compañía de los Caminos de Hierro del Norte de España que estaba sin servicio desde 2008 por la apertura de la Variante Ferroviaria de Burgos que dejó sin tráfico ferroviario el trazado original de 1860.
(31/03/2017)
La rehabilitación del edificio ha consistido en la recuperación de su imagen exterior, que se había degradado notablemente tras la pérdida definitiva de su uso ferroviario. El interior del edificio se ha reformado completamente, eliminando la entreplanta donde se ubicaron durante muchísimos años oficinas de Renfe y la sede la Asociación Burgalesa de Amigos del Ferrocarril (ABUAF).
Los nuevos espacios, denominados con nombres alusivos al ferrocarril como “El Apeadero”, “Taller Pesado”, “Taller Ligero”, “El Intercambiador” o “La Cabina”, se dedican ahora a espacios para propuestas infantiles y juveniles de ocio, cultura y nuevas tecnologías.
Entre las exposiciones creadas para la inauguración, de las asociaciones juveniles SIO2, Comunidad Maker y Entramado, destaca la titulada “Antigua Estación de Burgos: un lugar para la memoria”, de Luis Santos y Ganges y Jairo Rodríguez Andrés, que han recuperado valiosísimas imágenes de archivos y particulares para mostrar la historia ferroviaria del edificio burgalés.
Nuevos usos
En diciembre de 2008, la inauguración de la Variante Ferroviaria de Burgos dejó sin servicio el trazado original de 1860. Desde entonces, el lugar que ocuparon las vías se ha transformado en un bulevar que cruza de este a oeste la ciudad, y el antiguo depósito de locomotoras se ha convertido en la sala de conciertos “El Hangar”, referente del ocio local y regional.
El antiguo edificio construido en 1902, asumió el servicio de viajeros y mercancías de la línea Madrid-Hendaya, y con la creación de Renfe en 1941 también el de la línea Santander-Mediterráneo. En la década de los 50, y de cara a la llegada del Ferrocarril Directo de Madrid a Burgos, las instalaciones de ambas compañías se refundieron en una sola estación, y la actuación trajo consigo la supresión de la marquesina metálica que cubría las vías principales.