El pasado viernes 16 de mayo, Barcelona a acogió a una nutrida representación de miembros de asociaciones y colectivos ferroviarios, empeñados en la protección del patrimonio histórico ferroviario y la promoción de las circulación de estos vehículos históricos. El Grupo de Trabajo del Patrimonio Histórico Ferroviario de Cataluña ha sido el organizador del encuentro.
El Tren Histórico Turístico Río Eresma, un ejemplo que se consolida. |
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(21/05/2014) FGC fue, por tercera vez, la responsable de la convocatoria de esta jornada de trabajo y debate en torno al futuro del patrimonio histórico ferroviario. El eje de este nuevo encuentro, que tuvo lugar en la sala Espai Provença, fue el voluntariado, clave actual de la mayor parte de los proyectos.
El acto se desarrolló en dos partes. Tras la acogida por parte del presidente de FGC, Enric Ticó, Jaume Perarnu, del Museo de la Ciencia y la Técnica de Cataluña, y de la directora del Museo del Ferrocarril de Cataluña, Pilar Garcia, hubo una primera mesa de carácter más institucional en la cual estuvieron presentes representantes de los organismos que regulan la circulación, operación y gestión de trenes históricos.
Se contó con la presencia de Amador Robles, de Trenes Turísticos de Renfe Viajeros, que dirige la “ventanilla única”, el departamento que coordina en Renfe la circulación de todos estos trenes. En su exposición planteó las opciones del operador público y la voluntad de colaborar en los proyectos en curso en el marco de las actuales limitaciones legales y operativas.
Desde la Dirección de Seguridad en la Circulación de Adif, José Manuel Vázquez dibujó el marco legal que permite la circulación de estos convoyes históricos en la Red Ferroviaria de Interés General, bastante estricto pero con mejoras que van adaptando las normas a la realidad de los trenes históricos, desde luego no con la velocidad que las asociaciones quisieran.
Esta adaptación de normas y realidades fue uno de los puntos que expuso Miguel Jiménez, gerente de Protección de Bienes Históricos de la Fundación de los Ferrocarriles Españoels, que planteó como un sensible avance la creación de un grupo de trabajo de normativa histórica y que ya se ha traducido en algunos cambios, con la vista puesta en una revisión global y la perspectiva de desarrollar un marco que cubra las necesidades de los promotores garantizando la seguridad.
Una de las mesas de debate, concretamente la de voluntariado |
El ferrocarril turístico de Tarn arrancó en 1975 con 6.500 viajeros año. Ahora mueve 24.500. |
Desde el Delta del Ebro Joaquim Salvia presentó los avances de su proyecto de Carrilet del Delta, gestionado íntegramente por voluntarios, al igual que hizo Xavier Canals con el exitoso tren de La Poveda, un ferrocarril histórico integral, tanto en vía como en material, y que fue alumbrado y es operado por voluntarios, con proyectos interesante en la cartera, tanto de infraestructura como de vehículos.