(22/04/2013) El viaducto, que tiene una longitud de 438 metros, salva el cauce del río Nervión, la línea de ferrocarril Castejón-Bilbao, la carretera BI-625, y el ramal de accesos a Zarátamo y Arrigorriaga. Se apoya sobre siete pilas y dos estribos, con alturas que van desde los 4,5 hasta los trece metros.

El tablero tiene una anchura de catorce metros, en los que albergará doble vía de ancho estándar internacional, creando seis vanos con luces que van de los 41 a los 115 metros. Debido a la magnitud de las luces alcanzadas sobre el río, y la dificultad técnica y medioambiental de apoyarse en el cauce fluvial, el tablero se ha ejecutado empleando dos métodos constructivos diferentes: con dovelas sucesivas (voladizo) para los vanos largos, y mediante cimbra cuajada (convencional) en los vanos cortos.

La infraestructura se inscribe en el subtramo Galdácano-Basauri, de 3,5 kilómetros de longitud, que incluye además el túnel de Zarátamo, de 2.728 metros, por lo que más del 75 por ciento del trayecto discurre bajo tierra.

Ramal Vitoria-Bilbao

En este momento se trabaja en diez tramos del ramal Vitoria-Bilbao, que ejecuta Adif, lo que representa que más del 51,9 por ciento del trazado, sin contar los accesos a las dos capitales vascas, se encuentra en obras.

A esta cifra hay que añadir el 19,8 por ciento del trayecto ya terminado, que se corresponde con los 15,7 kilómetros de los tramos Arrazua/Ubarrundia-Legutiano I, Arrazua/Ubarrundia-Legutiano II, Abadiño-Durango y Arrasate/Mondragón-Elorrio.

Localización del viaducto del Nervión.