(11/02/2013) El presidente de los Ferrocarriles Rusos (RZD), Vladimir Yakunin, afirmó en Innotrans, el pasado mes de septiembre, que los retrasos a la hora de concluir la estructura financiera de la construcción de la alta velocidad significaba que la línea Moscú-San Petersburgo, de 659 kilómetros de longitud, no se completaría a tiempo del campeonato.

Sin embargo, aunque la estructura financiera no ha sido aún decidida, el recientemente publicado plan socioeconómico hasta 2030 prevé que la construcción de la línea Moscú-San Petersburgo y la primera fase de la línea Moscú-Kazan-Yekateringburgo empiece a finales de 2013 o principios de 2014.

Según el servicio de prensa del Ministerio de Transportes, primero se licitará la línea Moscú-San Petersburgo, mientras que los dos proyectos se concluirán en 2018.

Menos de tres horas de viaje

“El proyecto Moscú-San Petersburgo está totalmente preparado para su ejecución”, explica Denis Muratov, director general de Alta Velocidad Ferroviaria en RZD. Muratov afirma que el gobierno fijará un presupuesto por valor de 19.600 millones de euros para los dos proyectos durante los próximos cinco años, incluyendo casi 262 millones de euros para la supervisión y dirección del proyecto; 1.892 millones de euros para expropiaciones y trabajos preparatorios; y 14.489 para la construcción en sí.

También añadió que el coste total de capital de los proyectos, incluyendo la inversión del sector privado, será de algo más de 29.000 millones de euros. El plan socioeconómico prevé más inversión en alta velocidad en los próximos diecisiete años, lo que elevará la inversión total en 2030 a unos 148.000 millones de euros.

La línea Moscú-San Petersburgo estará diseñada para una velocidad de 400 km/h y reducirá los tiempos de viaje entre las dos ciudades a menos de tres horas. Se prevén unos tráficos de cinco mil pasajeros-kilómetro en 2018, aumentando a 7.500 millones en 2030

Futuro corredor ferroviario de alta velocidad entre las dos ciudades. Edición Vía Libre