Metro de Madrid está llevando a cabo la transformación del sistema de electrificación de la línea 6, con el objetivo de prepararla para la circulación de trenes sin conductor. Esta actuación forma parte del proyecto de automatización integral de la Línea Circular, que en 2027 se convertirá en la primera línea de la red con conducción automática, y permitirá reducir, hasta un 30 por ciento del consumo eléctrico en la línea.
(07/10/2025)
Durante la fase inicial de las obras acometidas en el tramo oeste, entre los meses de junio y septiembre, se ha aumentado la tensión de la catenaria de 600 a 1.500 voltios. Para ello ha sido necesaria la reforma integral de siete subestaciones eléctricas: Moncloa, Puerta del Ángel, Lucero, Carpetana, Plaza Elíptica, Usera y Arganzuela.
En estas instalaciones se han desconectado y desmontado las piezas antiguas, y se han incorporado nuevos sistemas de protección y control, además de transformadores y rectificadores adaptados al nuevo voltaje requerido para la futura automatización.
Ahorro del treinta por ciento de consumo eléctrico
Este cambio permitirá, además, una mayor eficiencia energética tras la reapertura completa de la L6 llegando a reducir, según arrojan los primeros estudios, hasta un 30 por ciento del consumo eléctrico en la misma, y un 3,6 por ciento en toda la red de metro madrileña.
La actuación supone un nuevo reto técnico en la historia del suburbano madrileño, ya que se ha realizado sin interrumpir por completo el servicio de la línea. Esto ha sido posible gracias a una planificación minuciosa, con la que se ha podido garantizar una demanda correcta de electricidad en la red en todo momento, lo que ha permitido evitar incidencias en las instalaciones.
Esta operación se repetirá en todas las subestaciones necesarias durante la ejecución de los trabajos en el arco este. La actuación está cofinanciada al 40 por ciento con cargo al Programa FEDER 2021 - 2027 de la Comunidad de Madrid.