Renfe ha informado de las consecuencias del vandalismo grafitero. Durante 2023, estas acciones sobre el material rodante generaron un coste de 25 millones de euros. En esta cifra se incluyen aspectos como la propia limpieza y los gastos indirectos que se derivan como la inversión en seguridad, tanto de personal como en sistemas tecnológicos.
(21/02/2024)
Según indica Renfe, los usuarios son los perjudicados directos de estas acciones, ya que provocan retrasos y la supresión de trenes por carencia de visibilidad o pintadas en los elementos de seguridad que impiden la circulación o frenazos de emergencia para pintar en medio de un trayecto. Además, el olor de este producto químico resulta muy molesto a los viajeros.
En 2023, el coste generado por estos actos en los trenes de Renfe, cerca 70.000 euros diarios, fue de más de 25 millones de euros. En el último año, los vándalos pintaron cerca de 80.000 metros cuadrados de superficie en trenes y se denunciaron 3.977 intrusiones de grafiteros en las instalaciones de la operadora, lo que representa una media de más de once actos vandálicos de este tipo al día.
Estos actos provocaron que se tuvieran que emplear 15.000 horas de trabajo de limpieza de grafitis, además de tener trenes detenidos 15.000 horas de forma no prevista para eliminar estas pintadas. La presencia de personal de seguridad de Renfe evita que este vandalismo sea mayo, ya que pararon 1.194 incursiones grafiteras durante todo el año.
Por último, como consecuencia de las actuaciones e investigaciones realizadas por el personal de Renfe y por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad se consiguió identificar y poner a disposición judicial a los autores de 124 actos de vandalismo.