(28/09/2023)  

El plazo de ejecución es de cinco años y la inversión necesaria para su puesta en marcha es de 26’8 millones de euros. Con esta planta, Renfe se dotará de una instalación de generación de energía eléctrica con una potencia de unos 20 MW.

 Al tratarse de un modelo de autoconsumo, la generación de excedentes se venderá al mercado. En cuanto a su ubicación, estará en la localidad de Olmedo, en Valladolid, en una superficie de 35 hectáreas, cercana a la subestación de energía eléctrica de Adif que alimenta el corredor norte de alta velocidad Madrid-Valladolid-norte. El objetivo de su puesta en marcha es lograr una mayor independencia en el suministro eléctrico e incrementar la producción de energía renovable.

Esta planta piloto, que es un proyecto pionero en España, servirá de banco de pruebas y de calibrado de parametrizaciones, entre otros aspectos. En ella se analizará cuál el nivel de autoconsumo real obtenido, que se estima que será elevado al producirse una alta coincidencia entre las curvas de generación de una planta fotovoltaica y la curva de consumo de la energía de tracción por parte de los trenes de Renfe. Los trabajos de investigación, diseño, ingeniería, construcción y puesta en funcionamiento estarán a cargo de la empresa Magtel, contratada por Renfe para estas labores.

Estas primeras placas son el punto de partida de un proyecto global que engloba hasta otras 34 plantas fotovoltaicas, con una potencia instalada de 400MW y una inversión global estimada de 350 millones de euros. Con ellas, Renfe continuará con el impulso, de forma proactiva, de la sostenibilidad medioambiental de los trenes con los que opera, que ya consumen energía procedente 100 por cien de fuentes renovables y que tienen un impacto de cero emisiones certificado por Aenor. Esta iniciativa incluye también el diseño, fabricación y la instalación de sistemas de almacenamiento, que contribuirán a que el autoconsumo se incremente.