Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com VI Premios Arco de Ladrillo de Asociación la Vallisoletana de Amigos del Ferrocarril

Aficionados:  Noticia de actualidad


Con motivo del 50 aniversario del apagado de la última locomotora de vapor de Renfe

Con motivo de la conmemoración, en 2025, del 50 aniversario del apagado de la última locomotora de vapor de Renfe, la Asociación Vallisoletana de Amigos del Ferrocarril (ASVAFER) ha concedido el VI premio 'Arco de Ladrillo', ex aequo, a las ocho entidades que actualmente mantienen activa la tracción vapor en España.


VI Premios Arco de Ladrillo de Asociación la Vallisoletana de Amigos del Ferrocarril
 
 
 

(02/06/2025)  

Las entidades premiadas han sido la Associació per la Preservació del Patrimoni Ferroviari i Industrial de Mora la Nova (Tarragona); la Associació per a la Reconstrucció de Material Ferroviarí de Lérida; la Asociación Venteña de Amigos del Ferrocarril, por su locomotora de vapor Verraco, que preserva y mantiene; la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y el Tranvía, promotora del Ferrocarril de Utrillas; Circulo de Iniciativas Ferroviarias Vapor Madrid en Arganda del Rey (Madrid), por su Tren de Arganda; la Fundación Riotinto, por el Ferrocarril Minero de Riotinto; el Museo del Ferrocarril de Asturias integrado en la Red Municipal de Museos del Ayuntamiento de Gijón, que ponen en marcha trenes de vapor en sus instalaciones; y el Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren en Azpeitia (Guipúzcoa), por los trenes de vapor que realiza entre Azpeitia y Lasao. 
                                                                
La entrega de estos premios, de la Asociación Vallisoletana de Amigos del Ferrocarril, en colaboración con el Centro de Interpretación de Ferrocarril Vapor Madrid  como anfitrión y colaborador principal del evento, y con el apoyo de la Agrupación de Ferrocarriles Históricos Españoles, se realizará excepcionalmente fuera de Valladolid este sábado, con el siguiente programa: A las 11:00 horas, se llevará cabo la recepción de participantes en la estación del Tren de Arganda, para que José Cañizares Moyano, presidente de Honor de la Sección Española de la Asociación Europea de Ferroviario, pronuncie unas palabras en homenaje a todos los maquinistas y fogoneros, en representación de todo el colectivo. Acto seguido, se realizará el acto de acto de entrega de los premios a representantes de las entidades ganadoras a pie de la locomotora de vapor del Tren de Arganda. 

A continuación, se realizará a un corto viaje con tracción vapor en el Tren de Arganda hasta el apeador de La Poveda para visitar el taller del Circulo de Iniciativas Ferroviarias Vapor Madrid y disfrutar de su histórico material ferroviario, además de a una maqueta de escala HO.

Después la comida en homenaje a los premiados, se llevará a cabo en el salón de actos del cercano Centro Integrado de La Poveda del Ayuntamiento de Arganda del Rey una presentación de cada una de las entidades ganadoras del Arco de Ladrillo de sus actividades en torno a la tracción vapor.

Apagado del vapor

El martes 23 de junio de 1975, se produjo del final de un ciclo histórico en el ferrocarril español. El, por aquel entonces, Príncipe Juan Carlos inauguraba la electrificación del corredor Madrid-Guadalajara, con el que Renfe eliminaba las últimas máquinas de vapor del servicio comercial. Con ese espectáculo simbólico se escenificó en Vicálvaro (Madrid) el cierre de una etapa; ante la llegada de un tren de mercancías arrastrado por la locomotora de vapor 'Mikado 141 F-2348', el entonces Príncipe se subió a la máquina, apagó la caldera de la ya vetusta locomotora y esta fue trasladada a una vía muerta. 

Pero otras líneas conservaron vivo el vapor algunos años más, sobre todo en las minas y factorías siderúrgicas del norte de España. Por ejemplo, la máquina 'Coronel Esteban' se mantuvo operativa en la Fábrica de Trubia (Asturias) hasta los primeros años noventa, pero sólo se encendía ocasionalmente. También las últimas las locomotoras de ferrocarril Andorra-Escatrón, hasta 1984; Hulleras de Sabero, hasta principios de la década de 1990; Altos Hornos de Vizcaya, 1982 o Ponferrada-Villablino, donde circuló el último tren con tracción vapor de viajeros en servicio regular en 1980 y mantuvo dicha tracción para trenes de mercancías hasta 1989.

Y desde luego, las máquinas de vapor de las entidades, reconocidas hoy en este evento, y que todavía lanzan al viento sus penachos de humo y vapor blanco para que este tipo de viaje y sus trabajadores no queden en el olvido.

Arco de ladrillo

El Arco de Ladrillo, monumento singular y enigmático en la ciudad de Valladolid, es una puerta sobre la línea Madrid-Hendaya, próxima a la estación de Campo Grande. Según el profesor Nicolás García Tapia, académico de la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción de Valladolid y reconocido investigador de la Historia de la Ciencia y la Técnica, posiblemente su origen esté en la tradición de señalar la entrada de los caminos de la ciudad por medio de puertas monumentales, aunque hay otras versiones sobre su origen. Fue construido en 1858, es decir, se levantó antes del tendido de las vías, por lo que puede ser considerada la primera construcción ferroviaria de la ciudad.

Salva todo el espacio de las vías trazando un arco de treinta metros de luz. Con un peso de ochocientas toneladas, toda la estructura consta de 147.276 ladrillos macizos, probablemente procedentes de la cercana fábrica de Joaquín Fernández de Gamboa, dispuestos en hiladas transversales, salvo en los estribos, donde son horizontales.

La Asociación Vallisoletana de Amigos del Ferrocarril es una asociación sin ánimo de lucro constituida en el año 1982, cuyo fin primordial es el fomento y defensa del ferrocarril en todas sus formas, así como la comprensión de su historia y la salvaguarda de su memoria. Su local social está situado en la antigua estación de La Esperanza de Valladolid, recientemente cerrada al tráfico ferroviario, donde cuentan con diversas maquetas a varias escalas, incluidas las maquetas de las cuatro estaciones ferroviarias históricas o actuales de Valladolid. Disponen también de una biblioteca, un simulador de conducción de una locomotora eléctrica y una importante colección de pequeño material ferroviario histórico.

También, en el entorno de la estación de Campo Grande, cuentan con un taller de restauración de material ferroviario, tanto locomotoras como coches y vagones, con un total de treinta vehículos históricos. Actualmente esta importante colección se encuentra recogida en las naves próximas de los antiguos talleres de Renfe. La Asociación plantea en todo este conjunto, formado por el depósito de locomotoras de vapor, único en Europa conservado con su forma, y algunas de las naves históricas de los antiguos talleres, un museo del transporte terrestre.