El Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo ha prestado 300 millones de euros a los Ferrocarriles Ucranianos para financiar la adquisición de locomotoras eléctricas. A ellos se suman otros 200 millones de euros en 2023 para mejorar los enlaces ferroviarios con la Unión Europea y 150 millones para liquidez de emergencia en 2022 para ayudar a Ucrania a mantener sus trenes en funcionamiento.
(13/01/2025)
A pesar del impacto de la guerra provocada por la invasión de Rusia, los Ferrocarriles Ucranianos han logrado mantener sus servicios de carga y pasajeros. El operador ferroviario nacional de propiedad estatal es uno de los mayores empleadores de Ucrania y el único contribuyente al PIB del país.
El Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo ha estado trabajando con la empresa ferroviaria desde antes de la guerra y la ha apoyado firmemente desde la invasión rusa. El último préstamo del Banco será cofinanciado por una subvención de inversión paralela de hasta 182 millones de euros, administrada por el Banco Mundial.
Garantizar el transporte de mercancías y pasajeros
El préstamo con garantía soberana ayudará a los Ferrocarriles Ucranianos a renovar su flota operativa y mantener sus operaciones. El objetivo es garantizar operaciones ferroviarias de carga estables e ininterrumpidas para las exportaciones agrícolas y las importaciones necesarias, así como para los servicios de pasajeros, que son vitales para las personas, la economía y el funcionamiento continuo del sector privado, así como para las iniciativas humanitarias.
Además de garantizar servicios de transporte para mercancías y pasajeros, incluidas las personas con discapacidad, los desplazados internos y los refugiados, la financiación ayudará a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, mejorar la eficiencia energética y apoyar a los trabajadores desmovilizados a través de un nuevo programa de reintegración de veteranos.
Desde febrero de 2022, el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo ha desplegado más de 5.400 millones de euros en Ucrania, incluidos más de 1.600 millones de euros este año, centrándose en la seguridad energética, las infraestructuras fundamentales, la seguridad alimentaria, el comercio y el sector privado, además de reformas políticas clave.
En 2023, la Junta de Gobernadores del Banco aprobó un aumento de capital de 4.000 millones de euros para apoyar la inversión en tiempos de guerra en los niveles actuales, y se destinarán más fondos para la reconstrucción posterior a la guerra.