(14/11/2023)  

El proyecto implica integrar un sistema de control digital de última generación, renovar infraestructuras clave y ampliar andenes, todo ello diseñado para dar cabida a trenes más largos y, por extensión, a más pasajeros. La promoción de una movilidad ecológica, ya sea a pie, en bicicleta o en transporte público, es una prioridad absoluta para Viena, una ciudad que aspira a ser un modelo de iniciativas climáticas.

Viena ya cuenta con una impresionante división modal y tiene la tasa más baja densidad de vehículos en Austria y se propone alcanzar la neutralidad climática para 2040, por lo que está ampliando significativamente la red de transporte público y carriles para bicicletas, y también se está centrando en mejorar los servicios para los viajeros. La modernización de la red de cercanías, incluyendo mejoras ecológicas en el entorno de las estaciones, es un paso crucial hacia un futuro más ecológico y el mantenimiento de la alta calidad de vida en la ciudad.