(05/05/2023)  

El informe muestra tendencias positivas en la incorporación de energías renovables en el transporte, que se han visto impulsadas significativamente por la crisis energética, la subida de los precios de los combustibles fósiles y el creciente compromiso de lucha contra el cambio climático.

El transporte por carretera es responsable de casi el 78 por ciento del consumo en 2021, mientras que el ferrocarril sólo representó el 3 por ciento. En este contexto, el Informe destaca la importancia de las estrategias de "evitar-cambiar-mejorar", para reducir la necesidad de transporte motorizado e incentivar el uso de modos menos intensivos en energía como caminar, ir en bicicleta y el ferrocarril.

Medidas

Recientemente, los Ferrocarriles Franceses, SNCF, firmaron un acuerdo de compra de energía solar  de  veinticinco años como parte de su objetivo de que entre el 40 por ciento y el 50 por ciento de su energía proceda de fuentes renovables para 2026. En un esfuerzo similar, los Ferrocarriles Austriacos, ÖBB, anunciaron que iban a invertir 1.000 millones de euros en proyectos hidroeléctricos, eólicos y solares.

En general, el sector ferroviario trabaja para mejorar la eficiencia energética y utiliza cada vez más fuentes renovables y tecnologías alternativas, como las baterías y el hidrógeno, que muestran la intención creciente de luchar contra el cambio climático y por la sostenibilidad, ofreciendo una opción de bajas emisiones de carbono en línea con la Visión 2030 de la UIC y de la campaña “Más Trenes”.