(13/04/2023)  

La instalación provisional, operativa hasta la finalización de los trabajos de integración, está situada a unos doscientos metros en dirección Molins de Rei respecto al actual edificio de viajeros que, a las 15:00 horas del domingo, quedará fuera de servicio.  

La nueva estación dispone de dos edificios independientes de estructura metálica, uno de ellos, de más de 118 metros cuadrados, destinado al andén sentido Molins de Rei y, otro, de más de 124 metros cuadrados, destinado al andén sentido Barcelona. Ambos andenes, de 190 metros de longitud, están protegidos con marquesinas metálicas y cuentan con instalaciones de megafonía, señalización, alumbrado y cámaras de video vigilancia. Al primero de los andenes se accede desde las calles Constitució//Passatge Fargas/Passeig Comte Vilardaga y, al segundo, por la calle Constitució (junto al Parc Nadal).

Cada uno de los edificios consta de máquinas expendedoras de billetes y controles de acceso. Además, en el edificio del lado Barcelona, se ha habilitado  el servicio de taquilla de venta de billetes.

Los accesos en ambos edificios se realizan directamente desde la calle, lo que permite el acceso peatonal y de personas de movilidad reducida. Los andenes disponen de pavimentación con franja de seguridad y pavimento podotáctil, que permite el uso por parte de usuarios invidentes, que también tendrán encaminamientos desde los edículos de viajeros. Para el tránsito de viajeros entre andenes, se utilizará la pasarela actual, equipada con ascensores.

Régimen de vía única

Los trabajos realizados por Adif hasta la puesta en servicio de la estación provisional, este domingo, han consistido en operaciones en vía, catenaria e instalaciones de seguridad y comunicaciones y la integración en el Control de Tráfico Centralizado de Barcelona, así como el traslado de las instalaciones de información y uso de los viajeros desde la actual estación. 

Respecto a la explotación ferroviaria, se va a establecer un régimen de vía única en los trayectos colaterales (Molins de Rei-Sant Feliu y Sant Feliu-Cornellà de Llobregat), manteniendo dos vías de estacionamiento en la terminal provisional.

Con la puesta en servicio de la estación provisional, se iniciará el desmontaje de las instalaciones que quedarán fuera de servicio (vía, catenaria y sistemas de seguridad y comunicaciones), y se continuará con los trabajos de integración del ferrocarril.

Esta nueva fase de las obras se inició con los trabajos preparatorios para la puesta en servicio de la estación provisional, y con afectaciones en los primeros y últimos trenes del día entre Cornellà-Castellbisbal/ Martorell, que se alargarán hasta el 15 de abril por la mañana.

Por lo que se refiere a la noche del sábado 15 al domingo 16 de abril, está previsto un corte nocturno que afectará a los trenes entre las 23:00 horas y las 7:00 horas entre Castellbisbal y L’Hospitalet. A partir de las 7:00 horas, la interrupción se reducirá al trayecto entre Castellbisbal y Cornellà hasta las 15:00 horas, momento en el que entrará en servicio la nueva estación de Sant Feliu.

Desmontaje de las antiguas instalaciones

Posteriormente, para desmontar las antiguas instalaciones, quedarán afectados los primeros y últimos trenes del día de los siguientes dos fines de semana de abril entre Castellbisbal y Cornellà. Para minimizar la afectación y asegurar la movilidad de los viajeros, Renfe establecerá un servicio alternativo por carretera en el tramo afectado durante todos estos períodos.

La integración del ferrocarril en el núcleo urbano de Sant Feliu de Llobregat impulsa una de las obras ferroviarias y urbanísticas más importantes de la transformación de la red ferroviaria en el área metropolitana de Barcelona.

Con un presupuesto superior a 120 millones de euros, la operación de integración, que incluye actuaciones complementarias, como la construcción de una nueva estación y diversas instalaciones ferroviarias, conseguirá la permeabilidad de la infraestructura ferroviaria de la línea Barcelona-Vilafranca del Penedès-Sant Vicenç de Calders entre los dos sectores de la trama urbana, creando nuevos espacios para los ciudadanos.

Asimismo, aumentará las condiciones de seguridad para los vecinos y la explotación ferroviaria, al eliminarse el paso a nivel en una zona con una elevada densidad de tráfico de vehículos y peatones.

Junto a la construcción de una nueva estación soterrada, cuyo edificio de acceso quedará integrado en la nueva urbanización del tramo soterrado, el proyecto promoverá nuevos esquemas de explotación de la red ferroviaria de proximidad en el entorno de Barcelona y su área metropolitana.