Page 94 - Revista Vía Libre Nº 649 - Marzo 2020
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a todo tren
furgón de cola
Durante la Guerra Civil, la
locomotora “Aurrera” de los
Ferrocarriles Vascongados
trabajó en el ferrocarril de
Lezama. En la actualidad,
esta locomotora sigue
prestando servicio en el
Museo Vasco del Ferrocarril.
JUANJO OLAIZOLA ELORDI
ARCHIVO EUSKOTREN/MUSEO VASCO DEL FERROCARRIL
En 1909 el ferrocarril de Lezama enlazó con el de
Luchana a Munguía con la construcción de un
pequeño ramal a Sondica.
ARCHIVO EUSKOTREN/MUSEO VASCO DEL FERROCARRIL/
no la oportuna autorización, refrendada por una
Real Orden promulgada el 29 de octubre de 1902.
El proyecto aprobado por el gobierno supo-
nía una transformación radical del primitivo ferro-
carril de Lezama, del que únicamente se aprovecha-
FRANK JONES rían los 4.668 metros finales de su trazado, desde
poco antes de llegar a la estación de Derio hasta
la estación del barrio de La Cruz, a las afueras de
Locomotora de vapor “Derio”, adquirida a Krauss en Lezama.
1908 para reforzar el servicio tras la reapertura del Los restantes 10,2 kilómetros quedarían al
ferrocarril de Lezama. margen, al ser sustituidos por una variante de tra-
zado de 7.167 metros que incluía la perforación de
quedaban apartados del servicio sin que hubiera un nuevo túnel de 1.350 metros bajo el monte Ar-
medios para sufragar sus reparaciones. Para colmo txanda, a una cota lo suficientemente baja, lo que,
de males, el 4 de octubre de 1901 estalló en la esta- unido a la construcción de otras tres galerías de
ción de Bilbao la caldera de la locomotora Nº 2 “Be- 799, 134 y 72 metros de longitud, respectivamente,
goña”, la única que le quedaba operativa a la com- limitó las mayores rampas a tan solo 16,9 milésimas,
pañía, lo que obligó a suspender el servicio ante la notablemente más suaves que la brutal ascensión
la FECHA
falta de material motor. y el consiguiente descenso original. En consecuen-
Ante el mal resultado de esta línea en sus po-
cia, el 65 por ciento de los 11.834 metros a los que
cos años de explotación no parecía lógico albergar quedaría reducida la línea serían de nueva cons-
demasiadas expectativas sobre su futuro, pero en trucción.
contra de cualquier pronóstico, sus propietarios no Una vez autorizado el nuevo trazado, se em-
solo decidieron recuperar la explotación, sino tam- prendieron las obras que, el 3 de marzo de 1905, vi-
bién invertir grandes sumas para la construcción vieron una brillante jornada, al encontrarse las dos
de una gran variante de trazado que, por una parte, galerías con las que se había afrontado la perfora-
permitiría eliminar la difícil subida y bajada del mon- ción del gran túnel de Artxanda.
te Artxanda y, por otra, acortaría el trayecto total Sin embargo, la puesta en servicio de la nue-
en varios kilómetros. Para ello se solicitó al gobier- va vía todavía se hizo esperar, ya que fue preciso
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