Page 71 - Revista Vía Libre Nº 666 - Octubre 2021

al de Casablanca y el 11 de enero de 1952 al Portaz-
go. La última línea abierta en la ciudad fue la de Las
Fuentes, inaugurada el 9 de marzo de 1957.
En paralelo a la ampliación, Tranvías de Zara-
goza prosiguió con su política de mejora del parque
de material móvil con la incorporación de algunas de
las series más modernas y novedosas del país. Entre
ellas, los dieciséis coches de la serie 100, introducida
a partir de 1943, formada por motores y remolques de
dos ejes que aportaban la novedad de formar com-
posiciones reversibles, al contar con una cabina de furgón de cola
conducción en el remolque. Esta posibilidad solo ha-
bía sido utilizada con anterioridad en España por los
tranvías de Barcelona.
Igualmente novedosa fue la incorporación de CHRISTIAN BUISSON
los coches de gran capacidad de la nueva serie 200,
que llegó a contar con veintiséis unidades. Con ellos,
Zaragoza disponía por primera vez de tranvías de bo- En 1959 Tranvías de Zaragoza introdujo cinco grandes
gíes, dotados con un moderno carrozado, inspirado tranvías articulados, construidos a partir de antiguas
en los tranvías PCC tan en boga en aquel momento unidades de dos ejes.
en los Estados Unidos, aunque con bogíes y equipos
de tracción convencionales. Ya en mayo de 1951, se inauguró el primer tra-
Además, dieciséis de las unidades más primiti- yecto atendido por trolebuses, de menor capacidad
vas fueron reconstruidas con nuevas carrocerías, de que los tranvías, pero, al menos, tan limpios como
similar factura, con lo que la capital aragonesa llegó ellos, al consumir energía eléctrica. Poco después, en
a contar con uno de los mejores parques de material 1955, también se implantaron en la ciudad las prime-
móvil de España. ras líneas de autobuses urbanos diésel.
La línea 7 Ayuntamiento fue la primera de las
La decadencia suprimidas en la capital aragonesa, el 6 de octubre de
1959. Le siguió, dos años más tarde, la número 2, que
Pese al constante esfuerzo que realizó la em- al igual que la anterior, era de muy corto recorrido
presa concesionaria por ampliar y renovar líneas y y escasa demanda. De este modo, la red de tranvías
material móvil, hasta el punto de ofrecer uno de los de Zaragoza se mantuvo prácticamente intacta, aun-
mejores servicios de transporte público de España, que las nuevas líneas de transporte urbano que se
Zaragoza no pudo eludir la nefasta moda de suprimir implantaron en la ciudad a partir de esa fecha eran
este medio de transporte tras la Guerra Civil. operadas, en su totalidad, por autobuses diésel.

Los tranvías de la serie 300,
procedentes del recarrozado
de antiguos coches del
tranvía de La Coruña a Sada,
conformaron la última serie
introducida en Zaragoza.

JOHN F. BROMLEY

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