(13/06/2018) Así, Adif pone a disposición de la Mancomunidad un tramo de suelo no urbanizable de la referida traza ferroviaria de unos 37,5 kilómetros de longitud, comprendido entre los kilómetros 113,560 y 130,895 de la antigua línea Lorca-Baza, y entre los kilómetros 1,893 y 22,027 de la antigua línea Baza-Guadix, que suman en total una superficie de 809.296 metros cuadrados.

Por este acuerdo, la Mancomunidad recibe los terrenos necesarios como entidad promotora del proyecto Vía Verde del Altiplano Granadino, con el objetivo general de aflorar recursos endógenos en la provincia de Granada y promocionar proyectos generadores de empleo, poniendo en valor y uso una infraestructura de carácter ferroviario que ya no responde a la funcionalidad para la que fue concebida.

Dentro de su longitud total, esta Vía Verde incorpora los 13,5 kilómetros que forman el recorrido de la actual Vía Verde de Baza. La firma de este nuevo contrato implica necesariamente la resolución previa y de mutuo acuerdo del convenio de cesión de uso correspondiente a dicha vía verde, firmado en 1999 entre Renfe y el Ayuntamiento de Baza.

Los terrenos de la traza ferroviaria correspondientes a las antiguas líneas mencionadas, que fueron cerradas al tráfico por Acuerdo de Consejo de Ministros de 30/09/1984, están incluidos en el Inventario de Bienes Inmuebles de Adif, con la naturaleza jurídica de bienes patrimoniales. Sobre parte de estas líneas cerradas hay ya implantadas tres vías verdes: la de Huércal-Overa, de 16 kilómetros de longitud, la del Almanzora, 66,5 kilómetros, y la mencionada de Baza, de 13,5 kilómetros.

Contrato por veinte años, prorrogables por diez más

Además de la traza ferroviaria, el contrato suscrito por Adif y la Mancomunidad incluye los elementos de la antigua infraestructura ferroviaria que se ubican en ella, con el fin de que sean única y exclusivamente destinados al establecimiento de la mencionada Vía Verde. Se excluyen expresamente de este arrendamiento todas las edificaciones y terrenos correspondientes a los antiguos recintos de las estaciones incluidos en la traza, por lo que Adif podrá disponer de ellos libremente, respetando en todo caso una franja de seis metros de anchura para mantener la continuidad de la Vía Verde.

La duración del contrato es de veinte años contados desde su firma, aunque por acuerdo expreso de las partes podrá prorrogarse por diez años más. Además se acuerda un plazo máximo de dos años, contados desde la firma del acuerdo, para la ejecución de las obras de adecuación que permitan la puesta en marcha de la Vía Verde.

La Mancomunidad costeará, instalará, conservará y mantendrá al menos tres paneles informativos, que serán instalados en el inicio y final de la Vía Verde y en el punto medio del recorrido o en cada uno de los antiguos recintos ferroviarios, para informar a los ciudadanos tanto del lugar en que se encuentran, como de una breve historia ferroviaria del tramo que están recorriendo.