El alcalde de Londres, Boris Johnson, y el secretario de Transportes de Gran Bretaña, Patrick Mcloughlin, inauguraron el pasado 10 de diciembre una ampliación de la red Overground de Londres, que discurre por el sur de la ciudad, y ofrece un servicio circular alrededor de la capital. Los servicios de viajeros comenzaron el día anterior. (Vídeo)
El túnel original de Brunel, construido en 1843, forma ahora parte de la línea circular de Londres. |
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(13/12/2012) El proyecto requirió la construcción de un enlace de 1,3 kilómetros para conectar las líneas existentes en Surrey Quays y Queen’s Road Peckham, lo que permite a los trenes circular entre Highbury & Islington y Clapham Junction.
El proyecto de ampliación se ha elevado a 92 millones de euros, de los que el Departamento de Transportes ha aportado 74 y la alcaldía y Transporte de Londres, dieciocho.
Dos millones de viajeros a la semana
London Overground es una red ferroviaria de cercanías que da cobertura a extensas partes de Londres y Hertfordshire, que gestiona London Underground Rail Operations como concesión y bajo la marca de Transporte de Londres. Se creó en 2007 y consiste en ochenta y tres estaciones repartidas en seis líneas.
London Overground ya transporta dos millones de personas a la semana, y conecta el norte, el oeste y el este de Londres con servicios frecuentes y fiables y estaciones atendidas con personal. La nueva ampliación por el sur de Londres completará la red, y ofrecerá un nuevo enlace entre Surrey Quays, en el sureste, y Clapham Junction, en el suroeste.
Modernización de metro y redes ferroviarias
Por la línea circularán cuatro trenes a la hora, que se detendrán en todas las estaciones entre Dalston Junction y Surrey Quays, Queens Road Peckham Rye, Denmark Hill, Clapham High Street y Wandsworth Road, antes de terminar en Clapham Junction. A partir de este punto, los servicios de London Overground discurren por el norte hasta pasar Willesden Junction.
El nuevo enlace es sólo una pieza de la inversión más importante en la red de transportes de Londres de los últimos cincuenta años, que incluye un extenso programa de modernización del metro y las redes ferroviarias.