Ayer miércoles, la ministra de Fomento, Ana Pastor, presentó en el Congreso el nuevo Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda (PITVI) plan, que con un horizonte de ejecución situado en 2024, plantea nuevos modelos de gestión y financiación de infraestructuras en una época de reducción de las inversiones. El Plan parte de un diagnóstico de la situación actual que en palabras de la ministra se resume en "falta de planificación y exceso de endeudamiento". Señala como ejemplo el que el 68 por ciento de la red ferroviaria tenga un bajo grado de ocupación.
(27/09/2012) El Plan, cuyo documento inicial fue presentado al Consejo de Ministros el pasado 3 de agosto, se basa, en palabras de Ana Pastor, “en una valoración realista de la situación del país, para, en coherencia con el proceso de consolidación presupuestaria en curso y con el máximo rigor en planificación de las inversiones, ser la principal contribución del Ministerio de Fomento para el crecimiento económico y la creación de empleo”.
Gráficamente, Pastor subrayó que “no hay aeropuertos sin aviones, ni trenes sin pasajeros en este Plan. Se hará un mejor uso de los recursos y se dará un nuevo enfoque de planificación integral medio y largo plazo y adecuada a las necesidades reales de los ciudadanos y se mejorará el uso de las infraestructuras existentes, como mejor garantía de sostenibilidad”.
El Plan que está, según afirmó la ministra, en sintonía con la planificación en otros países y con el Libro Blanco de la Comisión Europea, se marca cinco objetivos estratégicos: mejorar la eficiencia del sistema global de transporte, contribuir al desarrollo equilibrado de la economía, promover la movilidad sostenible, reforzar la cohesión territorial y social y favorecer al intermodalidad.
A partir de este momento el PITVI estará abierto a la participación pública e institucional para recibir aportaciones de comunidades autónomas, entidades locales, sectores económicos y empresariales, y de técnicos, científicos y profesionales, en un proceso que se prolongará hasta diciembre.
La preceptiva información pública y la redacción de plan definitivo terminarán en abril del próximo año y para la primavera de 2013, Ana Pastor augura la aprobación definitiva.
Diagnóstico
El PITVI que ha sido elaborado por técnicos del grupo Fomento ha tenido como hilo conductor en su gestación, “la utilidad real de las infraestructuras y la búsqueda de un modelo alejado del corto plazo que ha producido fuertes desequilibrios entre las infraestructuras y la demanda a la que atienden”, lo que se concreta en una oferta media de transporte suficiente, pero desequilibrada.
“Ha faltado planificación y ha sobrado endeudamiento y desequilibrios territoriales” señaló la ministra que como ejemplo puso el hecho de que “el 68 por ciento de la red ferroviaria española tiene un bajo grado de ocupación, que las terminales portuarias tienen una ocupación media del 40 por ciento, o que dieciséis aeropuertos tengan menos de100.000 pasajeros al año y veintiuno, menos de medio millón”.
También subrayó el deficiente reparto modal del tráfico interurbano de viajeros y mercancías, en el que la carretera copa el 90,45 y el 85,30 por ciento respectivamente, mientas que las cuotas del ferrocarril son del 5,24 y el 2,46 por ciento. El modo aéreo supone un 3,97 por ciento en viajeros y un 0,02 en mercancías y el marítimo porcentajes del 0,34 y el 12,23, respectivamente.
Multimodalidad
El Plan pretende romper con la visión unimodal que se desprende de estos datos y aprovechar el importante potencial de mejora intermodal que ofrece, por ejemplo, el ferrocarril en alta velocidad, “aprovechando sus conexiones con el ferrocarril convencional y la intermodalidad en los aeropuertos, y en el transporte de mercancías por ferrocarril que está muy lejos del lugar que le correspondería ocupar en el reparto modal, cuando en Europa su cuota se sitúa en el entorno del 17 por ciento”.
Para que ese potencial de mejor se concrete, Pastor subrayó la necesidad de potenciar el ferrocarril, “transformando y modernizando a los operadores públicos y liberalizando el transporte de viajeros y abriéndolo a la competencia”.
Asimismo, señaló, en general, la necesidad de mejorar la conservación y el mantenimiento de las infraestructuras, buscar nuevas fórmulas que favorezcan la inversión privada y mejoren la financiación y desarrollar una política normativa que estimule el mercado y la actividad. ”.
Tres programas de actuación
El Plan se estructura en tres programas de actuación, Programa de regulación, control y supervisón, Programa de gestión y prestación de servicios y Programa de actuación inversora, los dos primeros definidos con horizonte en 2018 y el tercero para el conjunto del PITVI 2012-2014.
En relación con el primer programa, Pastor destacó los proyectos de elaboración de una ley de financiación del transporte y una nueva regulación del transporte terrestre y la creación de una agencia estatal de seguridad del transporte terrestre.
En lo referido concretamente al ferrocarril, anunció un programa de ordenación del sector ferroviario que pasa un nuevo marco de liberalización efectiva del transporte de viajeros, por establecer roles de regulación y supervisión y un nuevo sistema de cánones de Adif, y las ya anunciadas integración de Feve en Renfe y Adif, y adecuación de Renfe Operadora a la liberalización con cuatro sociedades especializadas en distintas actividades.
El segundo programa deberá definir una cartera de servicios públicos y analizar la red ferroviaria actual para racionalizar la oferta de servicios ferroviarios, e implantar un nuevo modelo de gestión de servicios ferroviarios de mercancías.
Asimismo, prevé un nuevo modelo de gestión de las terminales de mercancías que favorezca la intermodalidad y la participación privada, la creación de un observatorio del transporte, de una carta de los derechos de los usuarios del transporte con derechos generales para todos y específicos por modos, y de un portal del transporte para el usuario informe y permita implantar el billete único.
Inversiones
El Programa de actuación inversora presentado por la ministra no precisó cantidades pero si el objetivo de adecuarse al marco económico general y definir un programa de inversiones estables para dar certidumbre al sector y optar siempre por la inversión más eficaz.
También resaltó la necesidad de diversificar las fuentes de financiación de manera que sin que los recursos públicos dejen de desempeñar un papel fundamental, se puedan movilizar recursos adicionales a los presupuestarios, mediante la apertura de mercados, las aportaciones de usuarios y beneficiarios, la internalización de costes, la financiación y la implicación del sector privado con fórmulas de colaboración público-privadas equilibradas y viables.
En cualquier caso, Ana Pastor sí precisó la inversión pública que implicará el Plan en términos de porcentaje del PIB. Así, tras afirmar que la inversión pública se estabilizará entre 2014 y 2015, situó el rango de inversión entre el 0,94 por ciento del PIB en el escenario más optimista y el 0,89 en el más desfavorable, lo que supone cifras inferiores a los de la década 2002-2011, pero próximas a los niveles medios de Europa y la OCDE.
Ferrocarril
En concreto para el ferrocarril mencionó como prioridades inversoras, la construcción de apartaderos de 750 metros para la red convencional y de 450 para al de vía estrecha y el refuerzo de las infraestructuras para permitir pesos por eje de veintidós y veinte toneladas respectivamente, en relación con las mercancías.
La mejora de la conectividad de las estaciones para optimizar transbordos y cambios de modo y la potenciación de las sinergias entre transporte aéreo y alta velocidad también forman parte de esas prioridades que buscan consolidar el sistema ferroviario y su viabilidad económica.
La red convencional recibirá inversiones para mejorar la calidad y la seguridad del servicio con el objetivo de buscar al rentabilidad social y económica, distinguiendo entre red de baja y de alta intensidad. También señaló Pastor el objetivo de adaptar de forma paulatina la red al ancho internacional, extender la implantación del ASFA en la toda la red, y la de ERTMS en los tramos con más de dieciocho circulaciones por hora y sentido.
En el ámbito de la alta velocidad, subrayó la necesidad de integrar la red con la convencional y de poner en valor las inversiones ya hechas y las que están en curso. Para estas últimas, la prioridad la marcarán la eficiencia social y económica, el grado de ejecución y en última instancia la disponibilidad de fondos europeos.
Por último, en las cercanías, englobadas en las actuaciones urbanas del Plan, se potenciarán las infraestructuras que favorezcan la intermodalidad, y se actuará en líneas y estaciones a partir de la elaboración de un plan global de mejoras. Asimismo se estudiarán nuevos servicios de proximidad entre núcleos de población con alta demanda.