Zhang Jianping, director general del Ministerio de Ferrocarriles Chinos afirmó que la línea de alta velocidad Pekín-Shanghai, que celebró su primer aniversario el pasado 1 de julio, ha transportado cincuenta y dos millones de viajeros en su primer año completo de funcionamiento. Zhang realizó esta declaración el pasado 11 de julio en el VIII Congreso Mundial de Alta Velocidad de la UIC celebrado en Filadelfia, Estados Unidos.
Por la línea Pekín-Shanghai circulan trenes CRH 380 A. |
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(16/07/2012) Zhang asegura que este resultado supera las expectativas, incluso pese a la decisión de que los trenes circulen a una velocidad máxima de 300 km/h, en lugar de la velocidad para la que fue diseñado el tren -380 km/h- antes del accidente acaecido en Wenzhou el año pasado. Líneas convencionales y de alta velocidad en la red china. (Ver mapa +)
Según Zhang, los ingresos recaudados por billetes en esta línea, de 1.318 kilómetros de longitud, se elevan a unos 7,7 millones de euros. Zhang también confirmó que la línea Pekín-Wuhan, de 1.125 kilómetros, se abrirá en dos etapas, en octubre y diciembre.
Construcción en una sola fase
La línea de alta velocidad Pekín-Shanghai conecta dos importantes zonas económicas de China: la denominada Franja Económica de Bohai y el delta del río Yangtze. Su construcción empezó el 18 de abril de 2008, mientras que la línea entró en servicio comercial el 30 de junio de 2011. Es la línea ferroviaria más larga del mundo construida en una sola fase. El coste del ferrocarril se elevó, aproximadamente, a unos 26.000 millones de euros.
La línea fue la primera diseñada para una velocidad máxima comercial de 380 km/h. Se preveía que el tren entre Pekín Sur y Shanghai Hongqqiao, sin paradas, invirtiera tres horas y 58 minutos en recorrer los 1.305 kilómetros del trayecto, consiguiendo un promedio de 329 km/h, frente a las nueve horas 49 de los trenes más rápidos que circulan por la línea paralela convencional.
Puentes y viaductos más largos del mundo
Sin embargo, tras el cese del anterior ministro de ferrocarriles, Liu Zhijun, en febrero de 2011, se anunciaron varios cambios importantes. En primer lugar, los trenes reducirían su velocidad a 300 km/h, disminuyendo así los costes operativos. A esta velocidad, los trenes más rápidos tardarían cuatro horas y 48 minutos entre Pekín Sur y Shanghai Hongqiao, haciendo una parada en Nanjing Sur. Además, circularían trenes más lentos, a 250 km/h, que harían más paradas y ofrecerían billetes más baratos.
Un 86,5 por ciento de la línea ferrocarril es elevada. Hay 244 puentes, siendo el de Danyang-Kunshan el más largo del mundo, con 164 kilómetros. La línea posee además otros viaductos, como el de Langfang y Qingxian, que figuran, con 114 kilómetros de longitud el primero, entre los más largos del mundo. La línea incluye también veintidós túneles, que totalizan dieciséis kilómetros. Mil doscientos sesenta y ocho kilómetros de la línea son de vía sin balasto.