Adif ha adjudicado al consorcio integrado por Getinsa Payma y TRN el contrato de redacción de la primera fase del proyecto constructivo para la remodelación de la terminal de mercancías de Madrid Vicálvaro, por un importe de 1.118.040 euros y un plazo de ejecución de dieciocho meses.
(18/10/2016) El objetivo de la actuación, licitada el pasado mes de julio, es adaptar este centro logístico a los estándares europeos y convertirlo en un centro intermodal de referencia. Dada la envergadura del proyecto, que supondrá una inversión de unos 156 millones de euros, y el crecimiento gradual de los tráficos, se ha previsto una ejecución por fases, que permita la progresiva entrada en servicio de la instalación, adecuándose así tanto a la disponibilidad presupuestaria como a los tráficos que deba soportar en cada una de las fases.
El centro logístico, situado al suroeste de la capital y con una extensión cercana a las 100 hectáreas, tiene una posición estratégica, tanto desde el punto de vista ferroviario, ya que forma parte de los corredores prioritarios de mercancías Atlántico y Mediterráneo, como viario, por su proximidad a la autovía M-45, M-40 y el Corredor Logístico del Henares.
Esta actuación se enmarca en el Proyecto Global de Implantación de la Estrategia Logística en España, llevado a cabo por el Ministerio de Fomento, y prevé la transformación, por fases, del actual centro logístico de Madrid-Vicálvaro en nodo intermodal estratégico, polivalente e integrado, que responda a las necesidades actuales y futuras del transporte ferroviario de mercancías en España.
Características del contrato
El contrato incluye la elaboración del proyecto funcional, con un plazo de entrega de tres meses, que consiste en la definición y planificación de los trabajos necesarios en cada una de las tres subfases en que se ha dividido su construcción.
El proyecto constructivo de la subfase 1, se separa a su vez en dos subfases. La subfase 1.1, contempla la instalación técnica de cuatro vías de recepción y expedición de trenes con composiciones de 750 metros. Su presupuesto máximo de licitación será de 17,6 millones de euros y cuenta con un plazo de entrega de nueve meses desde el inicio de los trabajos.
La subfase 1.2, con un plazo de entrega de 11,5 meses, incluye el módulo intermodal, compuesto por cuatro vías sobre balasto y la superficie destinada a las operaciones de carga y descarga de contenedores, incluida la maquinaria para llevarla a cabo. Su presupuesto máximo de licitación de esta fase será de 42,9 millones de euros.
Por su parte, el proyecto constructivo de la subfase 2 contempla el traslado de la vía general del lado oeste, así como una vía madre de acceso a las instalaciones existentes. Cuenta con un plazo de catorce meses y un presupuesto máximo de 41,6 millones de euros.
En el proyecto constructivo de la subfase 3 se definarán las actuaciones necesarias para la construcción del resto de instalaciones técnicas hasta las dieciocho vías previstas, apartado de locomotoras y servicios afectados, y la construcción de una playa de mercancía general y las diferentes zonas de actividades auxiliares. Esta tercera subfase cuenta con un presupuesto máximo de licitación de 53,8 millones de euros y un plazo de entrega de 16,5 meses desde el inicio de los trabajos.
Además, el contrato incluye la elaboración de un estudio de viabilidad económico-financiero de cada uno de los proyectos constructivos incluidos y, en especial, de las zonas susceptibles de ser licitadas para su gestión privada (zonas intermodales y zonas inmologísticas).
Objetivos del proyecto
Entre los objetivos del proyecto destaca la adaptación de la terminal al estándar internacional de trenes de mercancías, con instalaciones aptas para el tratamiento de trenes de 750 metros que permitan la integración con las redes europeas de transporte y potencien las relaciones transfronterizas.
Asimismo, se pretende mejorar la operatividad y funcionalidad de las actuales instalaciones, desarrollando un marco adecuado para la complementariedad y coordinación de modos de transporte, potenciando la eficiencia energética del transporte.
Otro de los principales objetivos es optimizar los recursos económicos, fomentando el uso de las infraestructuras existentes, adaptándolas a las actuales necesidades de transporte ferroviario, así como consolidar la red intermodal de plataformas logísticas y centros de mercancías, potenciando corredores intermodales de gran capacidad.