El Parlamento Europeo y el Consejo de Ministros de la Unión Europeo han alcanzado sobre el Cuarto Paquete Ferroviario que permitirá mejorar las prestaciones de los servicios ferroviarios en beneficio de los pasajeros mediante una apertura gradual de los mercados ferroviarios nacionales. Todos los operadores podrán ofrecer servicios ferroviarios en todo el territorio de la Unión Europea.
(22/04/2016) Según la Comisaria Europea de Transportes, Violeta Bulc, “el acuerdo abre un nuevo capítulo para los ferrocarriles europeos. Durante mucho tiempo, el sector ferroviario no tuvo incentivos para adaptarse a la demanda de los consumidores y, como consecuencia de ello, la cuota de mercado del ferrocarril fue disminuyendo de forma constante. Una apertura gradual del mercado mejorará las prestaciones de los servicios ferroviarios”.
Asimismo, la comisaria subrayó que el acuerdo creará nuevas oportunidades de inversión, potenciará la creación de puestos de trabajo en el sector y contribuirá a cumplir los objetivos de descarbonización.
Efectos
Tras el acuerdo, el cuarto paquete ferroviario abrirá gradualmente los mercados ferroviarios nacionales a la competencia y ofrecerá ventajas para los pasajeros, los poderes públicos y la economía europea en su conjunto.
Así, revitalizará los mercados del transporte ferroviario nacionales que, durante las últimas décadas, han visto como el tráfico ferroviario registraba una disminución constante, con la persistencia de monopolios nacionales. Con el Cuarto Paquete todos los operadores de la Unión podrán ofrecer servicios ferroviarios en todo el territorio de la Unión.
En cuanto a los servicios comerciales, los nuevos operadores podrán operar a partir de 2020. A partir de 2023, las autoridades competentes deberán adjudicar contratos de servicio público ferroviario a través de licitaciones abiertas a todas las empresas ferroviarias de la Unión Europea, excepto en casos específicos.
Adaptarse a la demanda
El Cuarto Paquete hará que el transporte ferroviario responda mejor a la demanda del mercado y de los consumidores. La apertura del mercado favorecerá la aparición de nuevos modelos de negocio y ofrecerá mayores posibilidades de elección a los consumidores.
La presión competitiva de los nuevos operadores también obligará a los operadores históricos a adaptarse y hacerse más próximos al consumidor. Sin embargo, los Estados miembros todavía podrán adjudicar directamente contratos de servicios públicos de ferrocarril, siempre y cuando se cumplan los objetivos de rendimiento, calidad, puntualidad, etcétera.
En los Estados miembros que ya han liberalizado su mercado se ha iniciado proceso de incremento de las frecuencias, mejores servicios y precios más bajos.
Inversiones
El Cuarto Paquete está en el núcleo de las prioridades de la Comisión Europea. Al abrir gradualmente los mercados nacionales del transporte por ferrocarril, completará el mercado interior de los servicios ferroviarios y cumplirá con el objetivo de lograr un mercado interior más justo y más profundo.
Además, fomentará las inversiones en el sector ferroviario y como ha sucedido en los Estados miembros liberalizados, que la apertura del mercado tendrá una repercusión positiva en la creación de empleo.
Por último, el ferrocarril, con diferencia el modo de transporte más sostenible, al hacerse más atractivo, favorecerá un cambio de hábitos de transporte en detrimento de otros modos más contaminantes y contribuiría a los objetivos de descarbonización de la Unión Europea.
Proceso
El Cuarto Paquete Ferroviario es un conjunto de seis propuestas legislativas presentadas por la Comisión Europea en enero de 2013. El Parlamento Europeo aprobó su posición en primera lectura sobre el conjunto del paquete en febrero de 2014 y el Consejo acordó la orientación general sobre las distintas propuestas entre junio de 2013 y octubre de 2015 (Ver noticia).
Con el acuerdo interinstitucional alcanzado ahora concluyen las negociaciones entre el Parlamento y el Consejo, y se afrontan las últimas etapas del proceso legislativo. El acuerdo ha de ser aprobado ahora por los Estados miembros y el Parlamento Europeo para, a continuación, ser adoptado formalmente por el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión. Se prevé que el proceso habrá finalizado en el otoño de 2016.
Una vez superados los trámites parlamentarios, el paquete de medidas servirá para completar el espacio ferroviario europeo único y cumplir lo establecido en la agenda de la Comisión en cuanto a lograr un mercado interior más justo y amplio.