La Comisión Europea ha emprendido una investigación sobre el uso de las ayudas estatales por parte del Gobierno holandés para el funcionamiento de los servicios ferroviarios en línea de alta velocidad HSL Sur, que enlazan Holanda con Bélgica.
Un tren Thalys en la estación central de Amsterdam. |
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(17/10/2013) La Comisión Europea ha pedido al Ministerio holandés de Infraestructuras que revele los detalles de los cambios que realizó en los términos y condiciones en la concesión de los servicios de alta velocidad Fyra, que se adjudicaron a la Alianza Alta Velocidad, negocio de participación conjunta formado por los Ferrocarriles Holandeses (NS) y la línea aérea KLM.
HSL-Sur es una línea ferroviaria de alta velocidad de 125 kilómetros de longitud que conecta la estación del aeropuerto de Ámsterdam, Schiphol, con Rotterdam y la frontera belga. En Bélgica, conecta con la línea HSL4, y termina en Amberes-Central. La Haya Central y Breda están conectadas a la línea de alta velocidad por líneas ferroviarias convencionales.
El 7 de septiembre, se inauguró la línea entre Amsterdam y Rotterdam. A partir de diciembre de 2009, empezaron a circular trenes Thalys entre Ámsterdam, Bruselas y París, y a mediados de 2012 entraron en servicio los fallidos trenes Fyra de Ansaldo entre Ámsterdam Central y Bruselas-Sur, suprimidos hace meses.
Rescatar de la quiebra
Tras los problemas con el material rodante de Ansaldobreda y la no implantación de los servicios previstos en el acuerdo de concesión de la línea Sur, el Gobierno holandés rescató de la quiebra a HSL en 2011, e integró la Concesión de Alta Velocidad en la Concesión de la Red Central para el período 2015-25, que se adjudicó a NS. Esto significa que la cuota anual que abona HSA al Gobierno holandés por la concesión de alta velocidad cayó de 148 a 101 millones de euros.
La Comisión Europea ha decidido analizar dicha operación, tras una denuncia realizada por la una asociación holandesa que promueve un mejor transporte público. Los cambios han sido criticados también por otros candidatos en el proceso de licitación que participaron en la concesión de alta velocidad, incluyendo a Arriva y Veolia.