El Consejo de Administración de Renfe cerró a finales del pasado mes de junio la revisión de las dos adjudicaciones para la fabricación de trenes de ancho variable realizadas en febrero del año pasado. Con ello se mantienen los 45 trenes de la serie 120, modificando los plazos, y se cambian las composiciones de los que constituirán la serie 130.
(03/08/2007) Tras la negociación de las condiciones de la adjudicación del concurso para la fabricación de 10 Trenes hotel de ancho variable, que ha supuesto un importante cambio en la estructura comercial de la oferta de esos trenes nocturnos), Renfe ha cerrado la revisión de las dos adjudicaciones trenes de ancho variable realizadas en febrero de 2004 (ver VIA LIBRE nº 473).
En aquella fecha se adjudicó a CAF-Alstom un pedido de 45 trenes de ancho variable para velocidades de hasta 250 kilómetros por hora destinados a prestar servicios de media distancia por vías de los dos anchos. Este pedido se unía a otro adjudicado en 2001 al mismo consorcio para el suministro de 12 trenes que constituyen la serie 120.
La segunda adjudicación contemplaba la fabricación de 26 trenes de ancho variable para trayectos de larga distancia a velocidades de hasta 250 km/h y su adjudicatario fue el consorcio Talgo-Bombardier. El consorcio CAF-Alstom resultó adjudicatario por un importe de 5838 millones de euros, en tanto que Talgo-Bombardier ganó el concurso por 3724 millones de euros.
Tras la revisión de las adjudicaciones, de los 45 trenes de alta velocidad de ancho variable adjudicados al consorcio CAF-Alstom, 29 seguirán destinados a la explotación de trayectos de media distancia, y modernizarán el parque de Renfe para esta clase de servicios cuya antigüedad media es superior a los veinte años.
Estas unidades (actual serie 120) ofrecerán 270 plazas de una sola clase, es decir 32 plazas más que las contempladas inicialmente, y no incluirán restauración a bordo, a estar enfocadas a prestar servicio en trayectos cuyo tiempo medio de viaje no requiere es tipo de prestaciones.
En términos económicos este bloque de trenes del nuevo contrato, tiene un precio de 3873 millones de euros, que se liquidarán entre este mismo año y el ejercicio de 2010. Asimismo se han ajustado los plazos de entrega para recibir el primer tren en 2007 y el resto, hasta el total de 29, en 2008, 2009 y 2010.
Renfe, además, realizará el 20 por ciento de la fabricación de este material y el 50 por ciento de su mantenimiento futuro, aportando carga de trabajo a la Unidad de Negocio de Mantenimiento Integral de Trenes (MIT), una unidad en fase de reconversión que Renfe prevé convertir en una industria altamente competitiva.
Larga distancia
Los restantes dieciséis trenes adjudicados inicialmente estarán destinados a su explotación en recorridos de larga distancia, trayectos en los que utilizarán indistintamente las nuevas infraestructuras de ancho internacional y las vías convencionales. Esta subserie supondrá un desembolso de total de 2137 millones de euros.
Los trenes, que tendrán 238 plazas y estarán preparados para ofrecer restauración a bordo y contarán con clases Preferente y Turista, serán entregados a Renfe en 2007 y 2008. También en este caso la unidad de negocio de Mantenimiento Integral de Trenes de Renfe realizará el 20 por ciento de la fabricación y el 50 por ciento del mantenimiento.
Serie 130
Con respecto a la adjudicación de los 26 trenes al consorcio Talgo-Bombardier el nuevo contrato ha cambiado sustancialmente la composición de los trenes a suministrar. Inicialmente se trataba de 26 trenes de 9 coches cada uno, lo que suponía una dotación total de 52 cabezas tractoras y 234 coches-, y tras la negociación el compromiso de suministro del consorcio fabricante se fija en dieciocho trenes completos de once coches cada uno, más diez cabezas tractoras y 54 coches, lo que supondrá, en total, 46 cabezas tractoras, es decir seis menos que antes, y 252 coches, dieciocho más que tras la adjudicación ahora revisada.
Esta adquisición permitirá agregar dos coches más a cada una de las 22 composiciones de la séptima generación en servicio (para las que se están fabricando 44 cabezas tractoras) y a las cinco composiciones fabricadas posteriormente (las tres primeras ya están en servicio desde julio de 2005) a las que además se dotará de cabezas tractoras. Así pues, en total se contará con 45 trenes de la serie 130 (22+5+18).
Con la negociación, todos los trenes de esta serie, que Renfe denominará Serie 130, tendrán once coches cada uno y un total de 299 plazas. Estas unidades comenzarán a prestar servicio en 2007 y supondrán una inversión total de 3672 millones de euros.
Con el cierre de estas dos negociaciones, Renfe dispondrá en 2010 de un parque de más de 100 trenes de alta velocidad de ancho variable, un material que permitirá maximizar el uso de las diferentes infraestructuras que hoy existen en la red ferroviaria española, la red de ancho internacional y la red de ancho convencional.
El uso indistinto de los dos tipos de ancho por parte de este tipo de trenes permitirá trasladar los beneficios de las líneas de alta velocidad a todas las relaciones en las que estos trenes presten servicio, lo que se traducirá en una mejora considerable de los tiempos de viaje.