La noche de este martes llegó al Museo de Delicias la locomotora 140-2054, popularmente conocida como Guadix. Esta máquina ha cubierto un largo recorrido coordinado por la Fundación de los Ferrocarriles Españoles y Renfe Viajeros. En una segunda etapa, tras una revisión en profundidad, afrontará el viaje hasta la ciudad accitana.
Ayer martes culminaron los trabajos de la primera fase del transporte de esta locomotora con su llegada a Delicias. Foto Antonio Pedrero |
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(15/01/2014) La locomotora 140-2054 es una máquina de vapor de la casa Babcock & Wilcox del año 1928. La máquina, cedida por la Fundación al Ayuntamiento de Guadix, estaba siendo gestionada por el Centro de Estudios Históricos del Ferrocarril Español desde hacía unos años, pero este pasado otoño, el ayuntamiento decidió recuperarla y trasladarla de nuevo a Guadix. Su objetivo es intentar, de nuevo, crear un tren turístico, apoyado en la tradición ferroviaria de esta ciudad y la memoria de ese pasado de rodajes de películas en las que tanto trabajó esta máquina.
El ayuntamiento encomendó a la Fundación el transporte de la máquina desde su ubicación hasta hace unos días, la estación de Portbou, hasta Guadix. De acuerdo con el ayuntamiento, se decidió efectuar el movimiento en dos etapas: la primera hasta Delicias, para hacer algunas revisiones, y la segunda hasta Guadix. El transporte se encomendó a la locomotora 333-407, de Renfe-Viajeros, la misma que remolca habitualmente el Tren de la Fresa.
Un largo y lento periplo
La máquina instantes antes de partir desde Porbou. Foto Antonio Pedrero |
El pasado viernes, técnicos de la Fundación y de Renfe colaboraron en el desmontaje de las bielas y la prepararon para la ruta. Esta fue especialmente lenta porque, por un lado, la velocidad máxima autorizada por Adif era de 50 km/h. Por otro lado, las necesidades especiales de engrase forzaban paradas cada cuarenta kilómetros, paradas que demoraban la marcha.
Además, la velocidad tan baja del convoy, con muchos tramos con vía única, exigía su detención en algunas estaciones, a veces de muy largo tiempo, para facilitar cruces y rebases y no dificultar la fluidez normal de la red. El personal de acompañamiento, dos maquinistas y dos técnicos de la Fundación, tenía que acoplar sus ritmos vitales a esas especiales circunstancias. En este sentido hay que destacar también la colaboración de los técncos de regulación de tráfico de Adif, que buscaron la mejor manera de encajar este tráfico en la malla, gestionando cuando fue posible el mejor irtinerario para minimizar killómetros y horas de viaje.
El viaje se inició la mañana del sábado 11, tras someter a una última revisión la máquina. El primer tramo hasta Figueras fue especialmente lento, siguiendo el protocolo de Adif y las prescripciones de los técnicos embarcados, que buscaban minimizar los riesgos para la locomotora. El viaje se realizó en varias etapas: Portbou, Martorell, Lleida, Calatayud y Madrid. En la capital ilerdense la máquina pernoctó en la base de la Asociación para la Reconstrucción de Material Ferroviario, donde se sometió a su primera gran reparación en 1998, y ahora la compartido techo con otros trenes en fase de restauración, como el TER o la Mataró. La acogida en este espacio permitió un aprovisionamiento de lubricantes y, tras la una pequeña revisión, afrontó el tramo final.
Ahora, tras la revisión a la que será sometida en Delicias por personal de Renfe y la Fundación, la máquina continuará en breve plazo viaje hacia Granada. En colaboración con la Fundación se trabajará en el diseño de un plan de gestión que la permita mantener su operatividad y colaborar en los proyectos de trenes históricos, como el que, de entrada, postula el ayuntamiento de esta ciudad desde hace ya varios años.
La composiciòn al paso por Roda de Bará. Foto Marc Lurigados |
La 140-2054, una vaporosa muy conocida.
Locomotora y ténder fueron construidos en 1928 por Babcock & Wilcox en Bilbao (Vizcaya), para la Compañía de los Ferrocarriles Andaluces, donde fue numerada como Andaluces 4.106. Posteriormente, al integrarse esta compañía en la Red Nacional de los Ferrocarriles Españoles la locomotora fue renumerada como Renfe 140‐2054. Las locomotoras de esta serie fueron destinadas a remolcar trenes de mercancías por la línea Almería‐Guadix‐Baza, siendo asignadas a los depósitos de Guadix y Granada. Al término de su vida activa, fue utilizada en rodajes cinematográficos.
Forma parte de la colección de material rodante del Museo del Ferrocarril de Madrid. En 1998 fue cedida al Ayuntamiento de Guadix, en Granada, que la restauró en 2001 para poner en marcha el Tren turístico “Comarca de Guadix”. Remolcó la composición del Tren de La Fresa en las campañas de otoño de 2010 y 2011.
El tren al paso por Lavern. Foto Javier López |