(18/10/2010) El proyecto, cuyo prepuesto se eleva a veintiún millones de euros, está encabezado por Ansaldo STS, en estrecha colaboración con empresas suministradoras de soluciones de ferrocarril y seguridad, universidades, la Asociación de la Industria Ferroviaria Europea (Unife) y cinco compañías ferroviarias que actuarán como usuarios finales: Los Ferrocarriles Lituanos (LG), los Ferrocarriles Polacos (PKP), los Ferrocarriles Nacionales Franceses (SNCF), los Ferrocarriles Turcos (TCDD) y los Ferrocarriles Eslovacos (ZSR).

Amenazas electromagnéticas

El objetivo principal del proyecto es reducir las diferencias entre los sistemas de seguridad en las distintas redes europeas, ofreciendo un conjunto de soluciones de seguridad viables e integradas, que tenga en cuenta los activos correspondientes, la naturaleza de posibles amenazas, requisitos técnicos y límites de explotación.

Ejemplos de los programas en desarrollo incluyen métodos para prevenir que los sistemas de distribución de señales y tracción sean víctimas de terrorismo electromagnético, detectando objetos extraños bajo o sobre el balasto.

Controles de seguridad en trenes

El programa también está estudiando la adopción de controles de seguridad diarios para los trenes, control de acceso a la cabina del maquinista y herramientas para proteger equipajes y detectar métodos de conducción no autorizados.

Durante su intervención en la presentación del proyecto, el presidente de UIC, Jean-Pierre Loubinoux, afirmó que reforzar la seguridad se ha convertido en un aspecto cada vez más importante para los ferrocarriles. “Implica hacer frente a la criminalidad diaria y también establecer respuestas a amenazas terroristas, para las que el sector del transporte constituye un objetivo atractivo. El impacto de este proyecto traspasará las fronteras de Europa porque la seguridad ferroviaria es también un tema fundamental en otras áreas del mundo”, afirmó Loubinoux.