Una línea que atraviesa Inglaterra de norte a sur se ha convertido en el trayecto más caro de la larga historia ferroviaria de Gran Bretaña. El tren que une el pueblo de pescadores escocés de Kyle of Lochalsune (al norte de la isla) y Newquay, en su punta más meridional, pasó de costar 486 libras (338 euros) en septiembre de 2008 a mil (1.125 euros)en mayo de 2009.
(11/01/2010) El dato se conoció el pasado noviembre gracias a un estudio del experto en ferrocarril Barry Doe en el que indaga las consecuencias de la privatización del ferrocarril en Gran Bretaña. Según Doe es la primera vez que un convoy que viaja dentro de la isla sobrepasa la barrera de la mil libras ida y vuelta. Es un convoy que viaja a velocidad estándar en el que se incluyen el menú a bordo.
Cross Country, la empresa que comercializa los billetes, asegura que nunca ha vendido un boleto para ese trayecto, que dura veinte horas y media y recorre 2.736 kilómetros. “pero tenemos que poner una tarifa para cada ruta, tanto si tiene éxito como si no”. Resalta además que, con ciertas ofertas web y reservando con antelación el mismo billete se puede obtener por 561 libras (631 euros)”.
Tras la publicación del informe analistas económicos han apuntado que los operadores privados publicitan sus mejores tarifas, las que como los vuelos low cost, se han de reservar con antelación y rígidas condiciones. “La privatización ha dejado un confuso legado de tasas medidas con un sistema de doble rasero. El de las tarifas reguladas por el Estado que solo pueden subir su precio un 1 por ciento más que la inflación y las no reguladas donde la industria impone su precio”, escribió el analista del Evening Standard Jonathan Prynn.
La investigación de Barry Doe muestra que, desde la privatización del ferrocarril británico, a mediados de los años 90 las tarifas para viajes de larga distancia han subido hasta triplicarse, en algunos casos. Mientras un viaje de ida y vuelta en primera clase desde Londres hasta Manchester costaba 134 libras en 1995, hoy cuesta 387. Si en 1995 el billete más barato entre Londres y Plymouth era de 39 libras hoy cuesta 72, lo que supone una subida del 85 por ciento.
Si se compara el precio de este billete con las tarifas de los trenes internos de otros países europeos, ninguno alcanza tales cifras y es más caro que algunas líneas transnacionales. Un viaje en la transiberiana de Moscú a Pekín cuesta 995 libras, cinco menos que la línea entre Kyle of Lochalsh y Newquay. Un trayecto en el Orient Express entre Londres y Zurich con comida incluida cuesta mil libras. Por último, un vuelo de ida y vuelta en un jet privado entre París y Londres para cuatro personas costaría 875 libras por persona.
El portavoz de transportes del partido Liberaldemócrata ha afirmado que “este tipo de decisiones desaniman a los pasajeros a coger el tren”. Una paradoja precisamente en un momento en que el ministerio de fomento quiere convertir al ferrocarril el eje central del sistema de transportes británico.
Incremento del precio en el ferrocarril británico desde su privatización
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Trayectos |
Clase turista (ida)
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Primera Clase (ida)
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1995
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2009
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Incremento
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1995
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2009
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Incremento
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Londres –Manchester | 33 libras | 66,10 libras |
100 %
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134 libras | 387 libras |
189 %
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Londres – Newcastle | 57 libras | 105 libras |
84 %
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186 libras | 375 libras |
102 %
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Londres - Edimburgo | 60 libras | 108,80 libras |
81 %
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190 libras | 397 libras |
100 %
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Londres – Glasgow
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60 libras | 108,80 libras |
81 %
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190 libras | 339 libras |
110 %
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