(30/09/2008) El diario portugués “Publico” informaba en su pasada edición del 25 de septiembre sobre esta importante novedad en el sector ibérico del transporte ferroviario de mercancías con la que comienza, de manera efectiva, la liberalización del tráfico mercante ferroviario en Portugal, el cual realizaba en exclusividad hasta la fecha CP.

Porque si bien la noticia, en primer lugar, tiene una clara afección a la red portuguesa, en pocos meses las actividades del grupo Takargo tendrán presencia en vías españoles. No será la primera vez que material tractor de un país entra en otro, pero si quizás, para el tráfico mercante regular.

Takargo es una empresa portuguesa dependiente del grupo logístico Mota-Engil, especializado fundamentalmente en la concepción, construcción, mantenimiento y gestión de equipamientos e infraestructuras, y con actividad en los sectores de turismo, concesiones de transporte, ingeniería y construcción, medio ambiente y servicios e industria y energía (ver noticia 10/04/2008). Takargo, tras la actual puesta en circulación de trenes de trabajo, comenzará su operación comercial regular con dos trenes de contenedores diarios entre Setubal, zona industrial y portuaria situada al sur del estuario del Tajo, y Alvera. Para ello deberán cruzar este estuario por la vía situada en el moderno puente colgante “25 de Abril”.

Puente 25 de Abril, sobre la desembocadura del Tajo, sobre el cual circularán los primeros trenes de contenedores entre Setubal y Alverca

Este tránsito, que actualmente se realiza por carretera, será encomendado a trenes cuya tracción será asumida por tres locomotoras de la serie 1400 adquiridas a CP.

Pero esta primera pequeña flota de tracción se verá reforzada, antes de fin de año, con la llegada de siete nuevas locomotoras Euro-4000 adquiridas a Vossloh  y producidas en su factoría de Valencia (ver noticia 08/11/2006). Con estas locomotoras, Takargo afronta un proyecto de transporte más ambicioso: una línea regular mercante entre Lisboa y Madrid. Para ello, Takargo rubricó el pasado mes de julio a un acuerdo de colaboración con Comsa Rail, gracias al cual se facilitarán estas operaciones internacionales (ver noticia 04/07/2008).

 

Esta relación internacional tendrá, en su primera fase, un carácter trisemanal, pasando a diario a medida que Vossloh vaya entregando a Takargo el pedido de locomotoras Euro-4000. Pero el encargo de Takargo no se ciñe a estas siete locomotoras.

Locomotora 1400 de CP similar a las que ha adquirido Takargo para operar sus primeros trenes (Foto Tgv41-Tranvía Portal)

En un plazo que se extiende hasta el 2012 se prevé completar una flota de catorce locomotoras similares (que, por otra parte, son idénticas a las que operará la española Comsa Rail) y de las cuales la primera ya ha sido entregada a Takargo. 

A ellas se añade un pedido de 125 vagones portacontenedores que también serán fabricados en España. En total, Takargo invertirá en factorías españolas 67 millones de euros, de los cuales 54 corresponden a las máquinas y los trece restantes para los vagones, que se fabrican en la planta de Tafesa en Madrid.

Los planes de Takargo son especialmente ambiciosos en estas relaciones internacionales. Entre los contratos firmados hay uno, con Renault, que ligará la planta de Valladolid con la de Aveiro, con un tráfico de cuatro trenes por semana, con un aprovechamiento integral del ciclo de transporte: en sentido Portugal-España los trenes transportarán cajas de cambio de automóviles y, en sentido contrario, piezas diversas.