La red francesa de servicios Intercity hace frente a un futuro “frágil e incierto”, según la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte Público (FNAUT), que advierte que el débil control e incertidumbre sobre la financiación amenaza la existencia de la red.
(12/09/2014) La Federación considera que una cuarta parte de la red interregional de viajeros, de 20.000 kilómetros, se perderá dentro de diez años si no se pone coto a los problemas de financiaciónn y afirma que se trata de una parte fundamental de la red ya que la red TGV de alta velocidad y los servicios regionales TER no pueden satisfacer todas las necesidades de los viajeros.
En diciembre de 2010, el Gobierno francés firmó un acuerdo con los Ferrocarriles Nacionales Franceses (SNCF) para revitalizar los trenes denominados equilibrio del territorio (TET), red de cuarenta servicios deficitarios de larga distancia, que pese a transportar más de 100.000 viajeros diarios registra baja ocupación en muchas áreas, con ingresos que no cubren los costes de explotación. Durante los últimos tres años, las pérdidas de explotación han aumentado de 210 a 312 millones de euros. Casi cuatro años después de la firma de la convención, FNAUT afirma que el gobierno no ha frenado el declive, y que desde 2010 se ha retirado un 10 por ciento de los servicios TET.
La Federación advierte que si el actual ritmo de descenso continúa, una cuarta parte de la red interregional de viajeros, de 20.000 kilómetros, se perderá dentro de diez años y exige al Estado, en colaboración con los gobiernos regionales, que identifique una red ferroviaria interregional mínima, y afirma que el débil control sobre la red puede solucionarse racionalizando la “confusa” división de poderes entre SNCF, las regiones y el Estado.
Material rodante moderno
El actual nivel de servicios Intercity se considera inadecuado y FNAUT afirma que es necesario realizar una completa revisión para estudiar aspectos como la puntualidad, los horarios, los servicios de abordo, los precios y las condiciones de reserva.
La Federación también estima que se necesitarán alrededor de tres mil millones de euros para dotar a estas líneas con material rodante moderno, y afirma que, en la actualidad, no existe una estrategia para sustituir la flota de trenes que ha superado su vida útil. También critica el uso de material rodante regional inadecuado en trenes interregionales, práctica que ha llegado a ser moneda corriente en algunas zonas de Francia.
Además, culpa a políticas generales de transporte de “empobrecer los servicios ferroviarios interregionales, a menudo a expensas de los viajeros más pobres”. FNAUT se refiere en concreto a los subsidios de los que se benefician los vuelos nacionales y al desarrollo de servicios interregionales de autobús.