Massachusetts Bay Commuter Railroad (MBCR), que lleva gestionando la red de cercanías de Boston (Estados Unidos) desde 2003, solicitará un mandamiento judicial para evitar que Keolis Servicios de Cercanías asuma la gestión en julio, alegando numerosas deficiencias durante el proceso de adquisición de treinta meses que, según afirma, violan las normas de licitación.
(11/03/2014) Massachusetts Bay Transportation Authority (MBTA) anunció el pasado 8 de enero que tenía previsto adjudicar un contrato a Keolis, valorado en unos 1.872 millones de euros, para la explotación y mantenimiento del servicio por un período de ocho años, con una opción de ampliación de dos años. MBTA afirmó que el precio de 3.069 millones de euros de Keolis era 183 millones de euros menos que el de MBCR, su único contrincante (3.249 millones).
El contrato se confirmó el pasado 6 de marzo, pese a recibir MBTA una protesta formal por parte de MBCR, en la que se afirma que había descubierto deficiencias y errores en documentos hechos públicos por MBTA tras presentarse las alegaciones públicas. “Estos errores incluyen una subestimación de 308 millones de euros de los costes ferroviarios de las cercanías, publicados en la Estimación de Costes Independiente de MBTA (ICE), que omitía costes tales como los beneficios salariales anuales garantizados de casi 3.600 dólares por empleado y siete millones de euros en costes existentes referentes a repuestos y materiales necesarios para mantener los trenes”, dice MBCR.
“Cuando se compara con un ICE riguroso, el precio fijo de coste de licitación cae en más de 360 millones de euros por debajo del precio realista de explotación del sistema. Adicionalmente, SNCF/Keolis no presentó un plan de seguridad detallado como se exigía en las especificaciones, y, en su lugar, ofreció la promesa de preparar algo en el futuro”.
Ocultamiento de documentación
MBCR alega también que la documentación dada a conocer por MBTA muestra que el subdirector de MBTA, responsable de la integridad del proceso de licitación, ayudó a Keolis en un intento aparente de esconder documentación que recogía la falta de cumplimiento de algunas de las propuestas de Keolis con las especificaciones.
“Los agujeros en el proceso de licitación de MBTA son suficientemente grandes como para que pasara una locomotora a través de ellos”, afirma Alan Moldawer, abogado de MBCR. “Toda licitación para un contrato público debe atenerse a un proceso estrictamente legal, pero MBTA no cumplió con la responsabilidad fundamental de ofrecer un terreno de juego justo para ambas empresas candidatas, y pasó por alto deficiencias obvias que permitieron a SNCF/Keolis permanecer en el proceso de licitación”.
MBCR es socio de Veolia Transportation, Bombardier Transportation y Alternate Concepts, mientras que Keolis Servicios de Cercanías es una división de Keolis Norteámerica, propiedad de los Ferrocarriles Nacionales Franceses (SNCF).