(30/11/2010) El director general realizó un repaso por todos los proyectos que el Ministerio de Fomento está llevando a cabo en Galicia y resaltó que se están cumpliendo las previsiones para la llegada de la alta velocidad. Así, a finales de 2011, se pondrán en marcha los primeros 150 kilómetros de alta velocidad al entrar en servicio la línea Orense-Santiago-La Coruña. En este sentido, la conexión Santiago-La Coruña adelanta su fecha de inicio, ya que estaba fijada para 2012.

En cuanto a la conexión con Galicia, todos los tramos se encuentran ya en fase de obras, salvo algunos tramos del trayecto Lubián-Orense, cuyos proyectos básicos han sido aprobados este mes y cuya construcción se abordará través del Plan Extraordinario de Infraestructuras mediante colaboración público-privada, lo que, según Juárez, posibilitará cumplir todos los plazos previstos para la llegada de la alta velocidad a la comunidad.

Conexión estación de Santiago-aeropuerto

Por su parte, el consejero de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras de la Xunta de Galicia, Agustín Hernández, hizo referencia durante su intervención al caso de Santiago de Compostela, una urbe con conexiones por carretera, por ferrocarril y aéreas, en la que falta una integración entre las mismas. Aclaró que con la llegada de la alta velocidad este reto se superará y “de hacerse realidad su conexión con el aeropuerto, se lograría la plena operatividad”.

El consejero recordó que este planteamiento ya se recoge en el estudio de metro ligero de Santiago e invitó a todas las administraciones a trabajar en paralelo para conseguir entre todos una adecuada conexión del aeropuerto de Lavacolla con el Eje Atlántico de alta velocidad ferroviaria, que "supondrá sin duda una revolución para la ciudad y para toda Galicia".

En este sentido, Hernández avanzó que, a medida que Renfe vaya poniendo en marcha estos servicios en el resto de las grandes ciudades gallegas, la Xunta se compromete a buscar su encaje en los respectivos planes de transporte metropolitano, para fomentar la intermodalidad.

Servicios de cercanías

El consejero señaló que es necesario potenciar los servicios de cercanías para los desplazamientos más cortos, sobre todo en los que se producen dentro de las áreas metropolitanas. Destacó que el Gobierno gallego está trabajando en esa línea, y anunció que en el Consejo celebrado el 25 de noviembre se aprobó el convenio marco del transporte metropolitano del área de Ferrol, en el que se incluyen las cercanías de Feve. Uno de los beneficios de este sistema para los usuarios es el billete único e intermodal con el resto de transportes públicos colectivos de la zona y con transbordos gratuitos.

Mercancías y Larga Distancia

El responsable de Infraestructuras del gobierno gallego defendió que el ferrocarril debe establecer sinergías con otros medios. También afirmó que es necesario potenciar el papel de las mercancías porque “está infrautilizado”.

“El ferrocarril es un sistema óptimo para desplazamientos de viajeros de hasta quinientos kilómetros, ya que minimiza consumos, ofrece una capacidad de plazas mayor y, sobre todo, porque conecta las ciudades por el centro y no por la periferia. Añadió que en este aspecto es dónde radica la importancia de la puesta en marcha de las infraestructuras de alta velocidad.

Agustín Hernández destacó que la orografía de Galicia dificulta el desarrollo de las infraestructuras de transporte, y que el problema no son las soluciones técnicas, que siempre las hay, sino la capacidad económica para ejecutarlas.

Recordó que, hace más de 130 años, en la línea Orense-Monforte ya se evidenciaron las dificultades orográficas de Galicia, y que en ese momento se priorizó el aspecto económico, sacrificando el trazado y mermando la visión de futuro de las líneas.

“Hoy no se puede caer en el mismo error, por lo que se debe diseñar una infraestructura válida para los trenes de hoy y los del futuro” y añadió que los trazados de características anticuadas son el lastre de la actual oferta de servicios. “El ritmo de vida actual hace que los gallegos valoren más su tiempo y por eso la mayoría no escoge el ferrocarril en ciertos trayectos, porque el servicio no ofrece la calidad suficiente, independientemente del precio”.