(05/02/2010) Con la reforma de la estación la ciudad tendrá en el futuro uno de los intercambiadores ferroviarios más importantes del área metropolitana de Barcelona y del Vallés Occidental.

La estación dispondrá de un nuevo vestíbulo dividido en tres zonas: una comercial, una zona de circulación a doble altura que tendrá iluminación natural y una última zona de acceso a andenes y locales de servicio. En total, 1.112 metros cuadrados útiles que serán totalmente accesibles para usuarios con dificultades de movilidad.

Las nuevas instalaciones estarán dotadas de ascensores y escaleras mecánicas para el acceso a los andenes, así como de nuevas salidas de emergencia, una de las cuales se dispondrá aprovechando la entrada actual. Habrá tres nuevos accesos a pie de calle desde distintos puntos de la plaza.

El método constructivo se basa en la ejecución de pantallas perimetrales de pilotes de 85 centímetros de diámetro que conforman la estructura del futuro intercambiador. Para la ejecución de esta obra serán necesarios 4.150 metros cúbicos de hormigón y más de sesicientas toneladas de acero.

Interior

En el interior de la estación se prolongarán los andenes hasta los doscientos metros, lo que favorecerá el uso de los mismos por distintos tipos de trenes, y su altura se situará en los 68 centímetros respecto a la cota de carril.

Los trabajos estarán concluidos en el plazo aproximado de un año, periodo durante el cual se producirán algunas afecciones a la movilidad de la zona. En cuanto al tráfico ferroviario, las incidencias serán mínimas, mientras que el tráfico rodado se verá puntualmente afectado como consecuencia de la ejecución de las nuevas salidas de emergencia. Dichos cambios serán oportunamente anunciados.

Esta actuación está incluida en el Acuerdo entre el Ministerio de Fomento y el Departamento de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalitat de Cataluña para la realización de actuaciones para la mejora de la red ferroviaria de Cercanías de Cataluña, firmado el 17 de mayo de 2007.