(17/04/2015) La Terminal Marítima de Zaragoza participan el Ayuntamiento de la ciudad a través de Mercazaragoza, el Puerto de Barcelona y el Gobierno de Aragón, junto a Ibercaja y empresarios locales acomete una ampliación de las infraestructuras, que doblará su capacidad tanto ferroviaria como de manipulación de contenedores.

Para ello se cuenta con el apoyo financiero del Puerto de Barcelona, principal origen y destino de los tráficos  y de entidades financieras, como Ibercaja. Por su parte, la sociedad operadora de la terminal, tmZ Services, acometerá un tercio de la inversión en todo aquello que hace referencia al depósito de contenedores.

La ampliación supondrá una inversión de cinco millones de euros y permitirá la construcción de dos nuevas vías de carga y descarga (algo más cortas que las tres primeras), configurando una nueva zona de operaciones y más de 25.000 metros cuadrados de nueva plancha operativa. También se ampliará una de las vías de recepción y se creará otra nueva, lo que incrementará un 33 por ciento el área técnica. Las obras estarán terminadas a finales del mes de julio.

Además, está prevista la instalación de una zona para conexión de contenedores de temperatura controlada que permitirá trenes conectados para la exportación e importación de productos agroalimentarios, de los que el valle medio del Ebro es un gran productor.

Plano de Mercazaragoza con la termnal de tmZ en su parte superior.

Aumento de actividad

La Terminal Marítima de Zaragoza finalizó el pasado ejercicio con unas cifras históricas de actividad y pasó de 135.000 teus en 2013 a más de 270.000 en 2014, lo que la convierte en una de las terminales de más empuje en el panorama nacional.

El enclave zaragozano sirve como terminal intermodal para las mercancías de todo el valle medio del Ebro y tramita las exportaciones e importaciones de todo tipo de carga industrial, si bien una parte de su actividad está dedicada a productos agroalimentarios por su fuerte vinculación accionarial con Mercazaragoza, donde está ubicada.

Los datos del pasado ejercicio reflejan más de 125.000 teus y más de 2.250 trenes con origen o destino TMZ. En cuanto a los cargadores, la infraestructura cuenta con el apoyo, entre otros, de Sicsa, Mac Andrews y TCB Rail, esta última concretamente apostó desde el primer momento por TMZ como su terminal de referencia.

La empresa considera imprescindible que la ampliación vaya acompañada de las inversiones necesarias para acondicionar para trenes de 750 metros, la vía Madrid-Zaragoza-Tarragona-Barcelona, que conecta con Francia y el resto de Europa, . Esta adaptación que no supone una inversión demasiado elevada y podría acometerse de inmediato, según sus promotores “conllevaría automáticamente un incremento sustancial de la competitividad de las exportaciones e importaciones que circulan por el corredor y en especial de las que se originan en el centro peninsular y Aragón”.

Se calcula que la mencionada adaptación reduciría en un 22 por ciento los costes de los servicios ferroviarios, lo que repercutiría en un incremento de la competitividad del comercio exterior aragonés.

Diferentes líneas de negocio

Para analizar el crecimiento de la actividad deben tenerse en cuenta las diferentes líneas de negocio de la terminal, y entre ellas la influencia de la implantación de la cadena de montaje del Opel Mokka en la planta zaragozana de General Motors, que ya implicó el pasado año una ampliación de TMZ.

Otro producto relevante es la alfalfa, producto que se exporta desde Aragón hacia los países de Oriente Medio. Esta producción, tan implantada en algunas áreas del área de influencia de la terminal, ha servido de impulso para optimizar las cadenas logísticas de muchas empresas importadoras y exportadoras de todo el valle medio del Ebro.

Cabe destacar también el aumento de los servicios con las dos principales terminales de contenedores del Puerto de Barcelona, que se tradujo en hasta seis frecuencias diarias el pasado verano. Pero además de las conexiones regulares con el puerto barcelonés, el año 2014 fue el de la consolidación de los servicios regulares con el puerto de Bilbao y, por extensión, de las conexiones con el Cantábrico desde Zaragoza.

Vista aérea de la gran losa de TMZ, con las vías con dos composicines estacionadas.

Ampliación del área de influencia

Todos ello conforma  a la infraestructura como un “hub intermodal”, terminal o plataforma donde se consolidan y distribuyen todas las mercancías desde varias procedencias y hacia diversos destinos. Desde el pasado verano, en el que la demanda de actividad se disparó, se han puesto en marcha otras mejoras mediante diversos desarrollos de los sistemas de gestión, con el objetivo de mejorar el servicio al cliente, aunque la empresa espera ver resultados aún mucho más significativos en este sentido en los próximos meses.

La función de hub intermodal implica mejores conexiones, fundamentalmente con los dos principales puertos del mediterráneo, Barcelona y Valencia, y con el puerto de Bilbao. Todos ellos importantes focos industriales, lo que supone una segunda ventaja a la hora de ser un centro de recepción y expedición de mercancías.