La ministra de Fomento, Ana Pastor, defendió ayer en Milán, en el marco del Consejo de Ministros de Transporte de la Unión Europea, que hay que seguir apostando por las redes transeuropeas de transporte. Pastor recordó que uno de los objetivos del Gobierno es hacer interoperable la red ferroviaria, y por ello, ante la convocatoria de los fondos europeos, que cuenta con 8.000 millones para todos los Estados miembros, “España va a presentar un paquete de proyectos todos ellos muy importantes para obtener financiación comunitaria”.
(18/09/2014) En este sentido, Pastor señaló que para España los proyectos más importantes son los ferroviarios, aunque sin descartar otros que se puedan incorporar, y los relacionados con la interoperabilidad de los puertos con la red ferroviaria, y viaria, “como elemento de competitividad clave para el futuro”.
La ministra explicó que España ha insistido en la importancia de las autopistas del mar, recogidas en el reglamento comunitario, y de su financiación. Para nuestro país son muy importantes, entre otras cosas por las conexiones con Francia e Italia, porque fomentan la competitividad de nuestra economía y la de los países vecinos, y por ello “vamos a apostar por esa conectividad y apoyarlas”, subrayó Pastor.
Carácter multimodal de los corredores
Durante su intervención en el Consejo, Pastor destacó el carácter multimodal otorgado a los corredores y el hecho de que se dé preferencia a proyectos que impliquen varios modos de transporte. En particular, recalcó la importancia de las autopistas del mar, de los puertos y los accesos a los mismos, como pieza clave de esta intermodalidad.
La ministra puso como ejemplo de “avance en fórmulas financieras ágiles y efectivas que den respuesta a las necesidades de promoción de proyectos de alcance multimodal muy concretos”, el fondo financiero de accesibilidad terrestre portuaria creado en España, que utilizará los recursos generados por los propios puertos para la mejora de sus accesos terrestres.
Pastor insistió en la importancia de la interoperabilidad, tanto en infraestructuras como en prestación de servicios, una vez que incrementa la competitividad de los operadores, consiguiendo a su vez un desarrollo coordinado de infraestructuras lineales y nodales.