Vista exterior de la nave cochera-taller recién inaugurada

(08/03/2013) La mañana del pasado miércoles 6 de marzo el antiguo núcleo ferroviario de Mora la Nova ha vuelto a vibrar ante un importante acontecimiento. En donde antaño se mantenían las locomotoras de vapor, el esfuerzo y las buenas prácticas de un grupo de aficionados al ferrocarril está consiguiendo que se vayan dando pasos para que de nuevo Mora cobre protagonismo ferroviario, ahora de la mano de la preservación de vehículos históricos. Así, este miércoles el presidente de la Generalitat, Artur Más, acompañado del subsecretario del Ministerio de Fomento, Mario Garces, y otras autoridades regionales y locales, presidieron el acto de inauguración de la nueva cochera y nave de mantenimiento de material histórico.

Ha sido precisa la inversión de 580.000 euros para la construcción de una nave, aportados por el Ministerio de Fomento, los fondos Feder de la Unión Europea, la Generalitat de Cataluña, el Ayuntamiento de Mora la Nova, la Fundación para la Preservación del Patrimonio Ferroviario Industrial (FPPFI) y la Diputación Provincial de Tarragona. La FPPFI, además de a los aficionados de Mora, vincula a cinco comarcas, dos ayuntamientos y a la camara de comercio de Reus.

Con esta inversión, que fue ejecutada por el consistorio de Mora bajo la dirección técnica del arquitecto municipal, Jordi Sasplugas, presidente de la APFI, se ha levantado una nave de 160 metros de longitud por 22 metros de ancho (3.520 metros cuadrados). Bajo esta estructura se acogen tres vías ya existentes del complejo ferroviario y una cuarta de nueva construcción. Esta última, de 250 metros y montada íntegramente por los voluntarios de la Asociación para la Preservacion del Patrimonio Ferroviario Industrrial, es la que incluye un foso de 75 metros de longitud, dividido tres partes: un foso simple, un foso bajabogies (pendiente de los automatismos de elevación) y un último tramo con la vía elevada sobre pilotes para la visita integral de los bajos y rodadura del material. 

Los políticos inauguraron la cochera a bordo del 10836	Descubrimiento de la placa inaugural

Un año de obras

Las obras se iniciaron en septiembre de 2011 terminando justo un año después. Fue preciso tender una nueva línea eléctrica soterrada de setecientos metros de longitud y crear un drenaje, también bajo la caja de las vías generales, para desviar las aguas pluviales a un barranco distante trescientos metros. Igualmente fue preciso acometer una traída de aguas de la red de riegos para dotar de un caudal para el servicio del taller.

Dentro de la nave se dispuso una losa continua de hormigón donde se embebieron los carriles, tanto los preexistentes como los nuevos, para crear un suelo de trabajo practicable en toda la superficie. En esta tarea y para la cimentación de los pilares fue preciso el vertido de la carga de 250 hormigoneras.

La nave cuenta con paredes con una estructura prefabricada de hormigón de veinte centímetros de espesor, con una cubierta tipo sándwich para amortiguar los rigores climáticos de la zona, extremos tanto en invierno como en verano.

Otro de los trabajos que han asumido los aficionados de Mora es la instalación eléctrica de toda la nave, con las tomas de corriente, de fuerza y los puntos de luz en techos. Asimismo, afrontaron la instalación de la red de aire comprimido. 

El foso  con acceso para visita integral de bajos	La conexión de este taller con la RFIG ya está solicitada

La nave se ha construido sobre una parcela de 9.900 metros cuadrados arrendada a Adif con derecho a edificación, por un periodo de veinte años, acuerdo que incluye la previsión de la solicitud del establecimiento de una consigna que regule la conexión de las cuatro vías a la Red Ferroviaria de Iinterés General, documento ya solicitado y que está pendiente de ser emitido por Adif.

Una segunda fase contempla la construcción de un módulo anexo a la nave, en el lado monte. Será un edificio de servicios de doscientos metros cuadradosy dos alturas, muy estrecho y que cubriría todo un lateral, donde irían vestuarios y un almacén. Las obras, que ejecutaría el ayuntamiento, tienen un presupuesto de 105.000 euros, y se pensaban iniciar este año, pero ha sido preciso demorarlo hasta el próximo ejercicio.

Salvo la locomotora Memé, que se custodia en la primera cochera taller que tuvo esta asociación (en unas pequeñas naves situadas junto a la torre del enclavamiento), todo el material preservado y en fase de restauración se ha puesto a resguardo en la nave recién inaugurada. 

Las tres locmotoras y las mesas preparadas para la fiesta	Discurso del presidente Artur Mas en el acto inaugural

Artur Mas departiendo con Jacqus Dafis, Pilar García y Jordi Sasplugas

Palabras de apoyo

El acto de ayer contó con la asistencia de unas trescientas personas, entre autoridades, aficionados y vecinos de las comarcas cercanas. El ayuntamiento dispuso un autobús para acercar a las invitados a la cochera. El presidente Mas y sus acompañantes, subidos en el frontal de la 10836, inauguraron simbólicamente la cochera rompiendo con la propia máquina la cinta que cubría el portón de la vía 4. Esta máquina ha sido precisamente presentada este día tras una labor de restauración mecánica y estética. Los visitantes recorrieron la instalación, y Mas tuvo la ocasión de departir con Jacques Dafis, presidente de la Federación Europea de Ferrocarriles Turísticos y Pilar García, directora del Museo del Ferrocarril de Cataluña. Éstos le explicaron que estos convoyes, gestionados básicamente por colectivos de aficionados, mueven cada año unos veinticinco millones de personas. Este dato fue expuesto en el discurso del presidente, que significó que es una cifra incluso superior a la global de todo el turismo en Cataluña.

Las palabras de Mas, que tenían como fondo escénico las dos locomotoras de vapor en fase de restauración, la Bonita y la Mikado, fueron de felicitación por el éxito de este proyecto, un excelente testimonio de la necesidad del voluntariado para poder llevar adelante ciertos proyectos. Expresó el reconocimiento que las instituciones hacen de la labor de la sociedad civil completando la acción institucional en proyectos que generan un alto valor, recuperando estas piezas de patrimonio industrial ferroviario.

Un proyecto con más retos por delante

El proyecto de Centro de Interpretación del Ferrocarril de Mora la Nova va superando con creces las expectativas iniciales. Los primeros trabajos fueron canalizados a la recuperación de la torre del enclavamiento original de la estación. Este torreón fue así convertido en un museo que recuperó los elementos de control del antiguo enclavamiento y dotó de elementos museísticos cada una de sus tres plantas. En las proximidades, en unas pequeñas naves del antiguo depósito, fueron trabajando sobre material ferroviario que fue llegando desde diversas procedencias, en buena parte fruto de las cesiones que ha ido haciendo a lo largo de estos últimos años la Fundación de los Ferrocarriles Españoles.Otro hito fue la reinstalación de una placa giratoria y el último eslabón ha sido la inauguración de esta cochera.

Pero el proyecto se propone la puesta en marcha de un tren turístico que una las Tierras del Ebro con la Costa Dorada y, en paralelo, convertir la nave en un centro de formación para personal de mantenimiento ferroviario, con un programa reglado con los itinerario formativos de las enseñanzas profesionales . Estos mecánicos serán los que mantengan tanto éste como otros posibles servicios ferroviarios en otras partes de España,

Mesa del enclavamiento de Mora, hoy eje del museo	La torre del enclavamiento

 

(Ver galería de imágenes de las obras)