El primer tren AVE llegó a España el 29 de noviembre de 1991, montado sobre unos diplorys de color rosa que permitieron transportarlo hasta la entonces aislada línea Madrid-Sevilla donde empezaría prestar servicio el 20 de abril del año siguiente.
(29/11/2010) El tren, el 02 de la serie 100, cuyo viaje se inició el 28 de noviembre, llegó tras un intenso período de pruebas en Francia, en la factoría que la antigua GEC-Alsthom tenía en la localidad francesa de Belfort.
En Hendaya ,el tren con sus cabezas tractoras separadas de la composición se montó sobre unos diplorys con los que pudo circular remolcado por una doble tracción de locomotoras 333 por la línea Madrid-Burgos.
La llegada de aquel primer tren se adelantó en un mes al calendario de entregas previsto e inició una cadencia que terminó en noviembre de 1992.
Simultáneamente, otro tren que llegó a España en diciembre de 1991, el 01, estaba realizando pruebas en la red francesa, sobre la línea de alta velocidad en la que se explota el TGV Atlántico, alcanzando los 310 kms/h.
El tren
El tren, un TGV Atlántico, era el que contemplaba la oferta con la que se adjudicó el concurso en marzo de 1989, pero con cambios en el diseño original, tanto de interiores como de exteriores, para hacerlo más afín al gusto del viajero español.
Las características técnicas también se adaptaron.: 3 kV en corriente continua, en lugar del 1,5 del TGV Atlántico, equipos auxiliares reforzados para permitir mayor potencia en la climatización y un nuevo sistema neumático en las puertas del tren adaptado a la orografía española para eliminar las molestias que la presión al paso de los túneles hubiera podido ocasionar a los viajeros.
El AVE fue también el primer sistema de alta velocidad en el que convivieron las dos tecnologías más avanzadas del ferrocarril europeo en la época, la francesa y la alemana. Ello supuso reordenar los equipos de cabina para permitir el embarque del sistema de señalización alemán LZB o modificar la mesilla del pantógrafo GPU para adaptarlo a las necesidades de la catenaria alemana.
Poco después de su llegada, aquel primer tren AVE batía su primer record en línea española: 325 kilómetros hora sobre el tramo de línea Parla-Mora de Toledo.