(01/12/2014) Por un lado, el Consejo de Administración de Adif Alta Velocidad aprobó el viernes la adjudicación del contrato para la construcción de plataforma y vía de los accesos a la ciudad de Granada (fase I) por importe de 5.458.180 euros.

Esta actuación consiste en la implantación en superficie de una vía única apta para circulaciones de ancho estándar internacional y ancho convencional, por medio de una vía única de tres carriles o de ancho mixto, en una longitud de 2,3 kilómetros, correspondientes a los accesos ferroviarios a Granada.

Para ello se utilizará el espacio que actualmente ocupa la plataforma de la línea de ancho convencional Bobadilla-Granada, con una serie de adaptaciones a las necesidades de los nuevos servicios ferroviarios que además requerirán la electrificación de la línea, objeto de otro contrato.

Pasillo de entrada ferroviario a la estación de Granada. Dede abajo la línea que viene de Moreda y en la parte superior la que viene de Bobadilla, que será la que canalice la entrada de la alta velocidad

Protección y seguridad en los túneles

Asimismo, ha sido licitado, con un presupuesto de 12.529.110 euros, el contrato para la ejecución del proyecto de construcción y mantenimiento de las instalaciones de protección civil y seguridad de los túneles de la línea de alta velocidad Antequera-Granada. Los seis túneles que se integran en el trazado se ubican en las provincias de Málaga y Granada y suman una longitud total de 9,6 kilómetros.

Las principales actuaciones recogidas en el proyecto de construcción son la ejecución de una red de protección contra incendios, la instalación de elementos de ventilación mecánica, la sectorización y colocación de puertas de seguridad, la ejecución de una red de detección de gases tóxicos y la instalación de un sistema de radiocomunicaciones.

Por su parte, las actuaciones del servicio de mantenimiento se centrarán en garantizar el funcionamiento de las instalaciones, manteniendo y sustituyendo los diferentes elementos que pudieran deteriorarse, además de asegurar la vida útil de las instalaciones.